Si el primer día la acusación era haber comentado, supuestamente, que “Obiang no regresará de su gira”, y ayer se le acusaba de “estar al tanto de un plan para asesinar al Presidente durante su gira”, esta madrugada le han obligado a confesar que los partidos políticos Convergencia para la Democracia Social (CPDS) y Fuerza Demócrata Republicana (FDR), tienen un plan para asesinar a Obiang. Interrogan a Joaquín Eló sobre las reuniones entre esos dos partidos, las veces en que Guillermo Nguema Ela, líder de FDR, ha entrado en la sede de CPDS, la última vez que lo hizo y los temas de los que se habló.

Joaquín Eló tiene las nalgas reventadas por la paliza recibida, lo que recuerda las imágenes del cadáver de Santiago Ebe, el militante de CI asesinado en la misma comisaría a principios de 2018, sobre lo cual el propio Obiang afirmó que Santiago Ebe “murió por enfermedad”. Sus torturadores le han asegurado que si hoy no confiesa los hechos de los que se acusa a CPDS y FDR, morirá de tortura.

En el momento de su detención, los siete policías que participaron en la operación registraron su casa y le requisaron un ordenador, un teléfono móvil y una cámara de fotos, entre otras pertenencias. La policía está usando ahora sus cuentas de Facebook y Whatsapp para comunicarse con sus contactos haciéndose pasar por él.

CPDS rechaza enérgicamente las acusaciones de la policía, que por otra parte no deberían sorprender a nadie, al ser el modus operandi del régimen durante cuarenta años de dictadura.

Dichas acusaciones son una simple cortina de humo para ocultar la verdadera crisis interna del régimen, una de cuyas consecuencias fue la intentona golpista del 24 de diciembre de 2017, cuyos autores siguen sin ser procesados por miedo a que el pueblo conozca la verdad sobre dicha intentona.

CPDS ha apostado, apuesta y seguirá apostando por una democratización de Guinea Ecuatorial por medios pacíficos, mediante el diálogo permanente y la concertación entre todos los actores políticos y sociales del país, pues este partido entiende que la violencia siempre engendra más violencia, y la muerte violenta de Obiang no serviría para traer la democracia al país.

CPDS alerta a la población y a la comunidad internacional, sobre la situación de Joaquín, cuyo objetivo es acabar con CPDS y aniquilar, de forma definitiva todo atisbo de oposición al régimen dictatorial del General-Presidente Obiang.

Malabo, 27 de febrero de 2019

LA COMISIÓN EJECUTIVA NACIONAL