La liberalización del comercio suele considerarse clave para impulsar el crecimiento y reducir la pobreza en África pero, ¿han resultado útiles el creciente número de pactos comerciales regionales? En un seminario sobre el comercio y la integración regional en África realizado en Dakar el 6 de diciembre, con el patrocinio del FMI y el Banco Central de los Estados del África Occidental (BCEAO), se evaluaron estos acuerdos y lo que se requeriría para incrementar el comercio y estimular el crecimiento. Sanjeev Gupta, Director Adjunto del Departamento de África del FMI, examina las actas.
En las últimas décadas, se han establecido varios acuerdos regionales de comercio en África, pero ahora han surgido preguntas sobre la eficacia de estos programas para impulsar el comercio y el crecimiento, y la integración regional. Los ministros de Burkina Faso, Guinea-Konakri y Senegal, así como representantes de varios organismos regionales comerciales y monetarios africanos, y personal del Banco Africano de Desarrollo, el Banco Mundial, la ONUDI y el FMI, se reunieron para evaluar la función de los acuerdos regionales de comercio y trazar nuevos rumbos.
En sus palabras de apertura, Anne Krueger, Primera Subdirectora Gerente del FMI, observó que ningún país ha podido sostener un ritmo acelerado de crecimiento sin abrirse al comercio internacional e instó a África a seguir el ejemplo de economías de rápido crecimiento como Chile y Corea, que han liberalizado unilateralmente el comercio y han obtenido considerables beneficios; en su intervención John Panzer, del Banco Mundial, concordó con lo expuesto.
Costos y beneficios
Varios participantes en el seminario, entre ellos Djene Camara, Ministro de Industria y Comercio de Guinea, plantearon inquietudes acerca del costo de la liberalización del comercio para los países en desarrollo. Un temor común es la pérdida de ingresos arancelarios, según reconoció Krueger, pero los datos indican que ello no siempre ocurre y el refuerzo de los impuestos internos puede restituir los ingresos perdidos.
Paraschand Hurry, del Mercado Común para África Meridional y Oriental, señaló que su organismo eliminó los aranceles sin gran pérdida de ingresos públicos.
En efecto, añadió Sanjeev Gupta, del Departamento de África del FMI, la liberalización del comercio puede elevar los ingresos si la merma de los precios internos incrementa la demanda.
En un sentido más general, Krueger advirtió, los acuerdos regionales deben complementar una liberalización amplia y no discriminatoria del comercio; no deben utilizarse para disfrazar un comportamiento proteccionista. El objetivo de los acuerdos regionales debe ser aumentar la participación de África en el comercio mundial e intrarregional, atraer inversión extranjera y mejorar su competitividad exportadora, pero varios estudios, dijo Gupta, indican que estas metas no se están alcanzando y los aranceles externos de África siguen siendo relativamente elevados.
Abdoulaye Bio-Tchané, Director del Departamento de África del FMI, instó a cuidarse de la posible duplicidad y conflictos entre los compromisos, y aumento de los mismos, en países que ya sufren escasez de recursos. Él y otros participantes solicitaron que se optimicen los sistemas de transporte y los procedimientos aduaneros y se reduzcan los obstáculos. Bio-Tchané subrayó que a África le conviene una mayor libertad en el comercio de servicios y en la circulación de mano de obra y capital.
En general, el seminario concluyó que no bastaría con enmendar los acuerdos de comercio regionales. Una liberalización comercial general, arguyó Gupta, mejoraría la asignación de recursos reduciendo el sesgo de sustitución de importaciones que afecta a los regímenes comerciales de África.Mamadou Diop, Ministro de Comercio de Senegal, instó a los participantes a plantear sugerencias concretas para impulsar el comercio de África, mientras que el Gobernador del BCEAO, Charles Konan Banny, lamentó la insuficiente diversificación de las economías de la región y la pequeña y decreciente participación de África en el comercio mundial.
Varios participantes consideraron que la liberalización del comercio complementa otras iniciativas. Camara, por ejemplo, recomendó integrar las políticas comerciales a las estrategias nacionales de reducción de la pobreza. Y Olawale Ogunkola, Profesor de Economía de la Universidad de Ibadan, Nigeria, resaltó el valor de aumentar la inversión en capital físico y humano.
En el resumen de las actas, Bio-Tchané observó que existe amplio apoyo para renovar los acuerdos de comercio, aumentar la cooperación aduanera transfronteriza, mejorar la infraestructura para reducir el costo de movilizar bienes, reforzar los sistemas tributarios directos e indirectos para recaudar ingresos perdidos a raíz de la liberalización comercial, e integrar la política comercial en las estrategias de reducción de la pobreza. El Departamento de África del FMI examinará estas cuestiones en sus conversaciones con los países y en la supervisión que ejerce sobre la región.
Fuente: Boletín del FMI 31 de enero de 2005.
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