ANTE EL TEATRO DE UNA EITI EN GUINEA ECUATORIAL

En un país en que más de 300 personas se encuentran encarceladas después de sufrir torturas, cuyo presidente maneja a su antojo sin transparencia las rentas del petróleo, creando empresas en paraisos fiscales como Kalunga Company S.A. en Panamá, que realiza transferencias de los dineros públicos a sus privadas empresas fantasmas creadas en varios países, en que eL parlamento no discute ni aprueba los presupuestos generales del Estado y que no realiza el preceptivo control ex-post de los gastos públicos realizados, en que el presidente tiene dos aviones, uno de ellos un B-737 de lujo cuando no hay aviación nacional comercial, un país en que casi el 30% de la población se encuentra en el exilio por miedo a sufrir cárceles o perder la vida, en que no existen hospitales con los mínimos recursos teniendo unos ingresos medios anuales de casi mil millones (1 billon) de dólares, en fin, un país en que la población está aterrorizada y nadie garantiza ni sus vidas ni sus derechos,

en ese país, hablar de una iniciativa para la transparencia en los ingresos derivados de las industrias extractivas es un sarcasmo.

Guinea es un estado de opereta donde un señor tiene secuestrada a la población mientras hacia el exterior dice que tiene una democracia...a la ”ecuatorguineana”.

Kofi Annan acaba de reconocer lo que venimos diciendo desde hace años los guineanos: las Naciones Unidas son incapaces de garantizar los Derechos Humanos en las actuales circunstancias.

Y tal como se van a hacer las cosas, las organizaciones internacionales como el FMI y Banco Mundial, no sólo son incapaces de garantizar la transparencia de los ingresos petrolíferos y de combatir la corrupción, sino que su actitud y forma de actuar supone un apoyo para la consolidación de los crímenes económicos del presidente Obiang.

Ante esta situación, el diagnóstico que hacemos es el siguiente:

La EITI puede nacer muerta desde el comienzo si se permite que Obiang realice una estafa moral al concepto y a los requerimientos del EITI.

Porque todos los guineanos, todos los africanos y casi todo el mundo conoce el expolio pavoroso que realiza Obiang a las riquezas de Guinea Ecuatorial.

Todo el mundo conoce la grave contradicción que supone que los guineanos sean los más pobres del mundo teniendo uno de los mayores recursos por habitante del mundo. La producción petrolífera real de Guinea es superior a 400.000 barriles diarios, siendo su población 400.000 habitantes, o sea, un barril diario por habitante.

La dictadura del presidente Obiang, además de los diversos y graves atropellos contra la población, ha conseguido eliminar cualquier intento de que pudiera existir una sociedad civil organizada dentro del país. Una sociedad civil organizada no es algo amorfo, sino que se estructura en torno a unos líderes sociales y en Guinea, todos los líderes o personas con inquietudes están muertas o encarceladas o en el exilio. Unos pocos han dejado de realizar funciones de dirección social porque son pagados por Obiang como dirigentes de unos partidos ficticios o inexistentes.

No es posible realizar una sola reunión en Guinea de más de 10 personas porque se considera un atentado a la seguridad del Estado.

No es posible viajar en libertad por el interior del país. Hay barreras militares cada 30 kilómetros como media.

El viaje en avión entre Malabo y Bata -y viceversa- tiene control policial donde se registra a todos los que embarcan en una lista.

El acceso a internet está restringido y controlado y los cibercafés tienen policías que toman nota de los que utilizan los ordenadores.

No hay energía eléctrica continua ni en Bata ni en Malabo, lugares donde podría existir una pequeña actividad social organizativa.

No existen ni imprentas ni librerías en ninguna parte de Guinea, porque Obiang considera que es peligroso para la seguridad del Estado.

La presencia de militares en las calles de las ciudades denota una situación de guerra. La gente no puede hablar salvo en sus casas y la sensación es de terror auténtico.

Ante este estado de cosas ¿Cómo es posible de que se hable de una sociedad civil?
¿Como es posible que un gobierno que tiene aterrorizada a la población tenga una voluntad real de ser transparente?. ¿De qué transparencia estamos hablando?.

Es evidente que el gobierno de Obiang hará lo que hace siempre: organizar con afán de angañar a un grupo de personas a su sueldo y aterrorizadas para que hagan el papel de organizaciones civiles. Eso lo saben todos los guineanos.

No se debería seguir con este juego criminal.
Nosotros no pedimos que Guinea se asocie al EITI. Nos basta que haya una mínima libertad en Guinea, que se excarcele a la gente, que la gente pueda viajar sin control, acceder a la información, leer prensa libre, reunirse. Y todo ello incluso aunque haya una dictadura.

Nuestra organización Foro Solidario por Guinea Ecuatorial nació con ánimo de luchar por los presos políticos numerosos que existen en Guinea. Y por los Derechos Humanos, entre ellos los Derechos Económicos. Pero hasta ahora los instrumentos normales utilizados no han sido capaces de conseguir la excarcelación de un solo preso político, a pesar de los diversos y numerosos requerimientos hechos al presidente Obiang para que suavice su horrible tiranía.

Nosotros no podemos ir a Guinea a asistir a una reunión de una supuesta ”sociedad civil”. El trabajo que hemos hecho, las denuncias que hemos formulado constituyen una condena automática contra cualquier miembro de nuestra asociación.

Cualquier organización seria debería abandonar cualquier idea de participar en estas reuniones ficticias, que serán la escenificación teatral de la muerte temprana del EITI. Nos estamos refiriendo al CPDS, que debería dejar su plan de participar sin participar para luego aducir que no le dejan participar.

El Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional deberían abandonar la idea de participar en el teatro que prepara el gobierno de Obiang. Si persisten en su idea de participar y participan, harán que los guineanos y el mundo entero pierda la fe en estas organizaciones como instituciones serias.

Y lo que es peor. Si esas organizaciones participan en la teatralidad de una EITI en la peor dictadura del mundo, habrán ayudado al dictador a continuar con sus crímenes de lesa humanidad.

En la reunión del 12 de abril en Malabo, el FMI/BM debe ser contundente: Obiang debe abandona su práctica de aterrorizar y de engañar de forma permanente, como condición previa a una negociación o reunión sobre transparencia de la industria petrolífera. Sin libertad no es posible el EITI

Celestino Okenve
Proferor Universidad Politécnica de Madrid
Presidente de Foro Solidario Por Guinea Ecuatorial
presidente@forosolidario.org
http://www.forosolidario.org
http://www.fsge.org

Fuente: propia

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