Madrid.- 13 de julio de 2005.
”SE DECRETA EL SOBRESEIMIENTO LIBRE Y EL ARCHIVO DE LAS PRESENTES DILIGENCIAS al no ser los hechos denunciados constitutivos de infracción penal”.

Esta frase la escuchaba el opositor y Presidente del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio, Severo Moto, de labios de su abogado.Hacía calor y el trasiego de personas por los pasillos y salas de los juzgados no era el mejor lugar para suspirar, aliviado, por tan sabia y justa decisión del juez. Moto salio a la calle y cerró los ojos. Los que le siguen y le conocen, casi siempre, respetan ese momento íntimo de reflexión y, ahí, cerca de él, un grupo de miembros del gobierno en el exilio y de partidos de la oposición, le acompañaban en respetuoso silencio.

Severo Moto siempre ha mostrado su desagrado por que se hagan manifestaciones de júbilo hasta que no este libre el pueblo de Guinea Ecuatorial. No hubo celebraciones ni abrazos. Todos esperaban que el juez de instrucción archivara la denuncia presentada por un alto representante de la tiranía contra Severo Moto. Así ocurrió y juntos acudieron a una cafetería para leer los argumentos jurídicos y agradecer el magnífico trabajo del abogado.
Los primeros meses del año estuvieron marcados por una ofensiva por parte de la dictadura contra la oposición exiliada en España. Los distintos grupos opositores mantenían conversaciones para preparar un plan de emergencia que salvara la catastrófica situación de Guinea Ecuatorial. Severo Moto acaparaba la atención de los medios de comunicación como el máximo exponente de la disidencia guineana. En su afán por destruirlo, la tiranía, no reparó en gastos y mantuvo a pleno rendimiento dos equipos de expertos ( que se sepa) tapando el indecente y escandaloso saqueo al que somete a una cruelmente maltratada población mientras acusaba a Moto de una esperpéntica “operación golpista”.

Corrían malos tiempos para los exiliados. El Gobierno del Presidente Rodríguez Zapatero- en política exterior, sobre todo- mantiene una postura , absolutamente, hostil contra la figura de Severo Moto mientras, por otro lado, es “especialmente bien recibido” en los foros internacionales.

La presión que la dictadura imprime a la oposición llevó a un miembro de la tiranía a poner una denuncia, por injurias, contra Severo Moto.

Las consideraciones que hace el juez del juzgado de instrucción número 24 de Madrid, son de gran interés:

“... RAZONAMIENTOS JURÍDICOS ÚNICO.- Las actuaciones practicadas acreditan que el hecho denunciado no reviste caracteres de infracción penal por lo que, de conformidad con lo dispuesto en los artículos 637.2° y 779.1 regla primera de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, procede acordar el SOBRESEIMIENTO LIBRE Y EL ARCHIVO de las mismas. En efecto, de la declaración del imputado se desprende que no niega las expresiones que el querellante entiende como injuriosas, en su literalidad, pero las justifica como un acto de expresión que trata de poner en evidencia pública el nombre de una persona que justo días antes de la manifestación al periodista viene desde Malabo y que según informaciones confidenciales, lo hace con la intención de causarle problemas al imputado como representante del mayor partido de la oposición al régimen instalado en Guinea Ecuatorial.

Sin ser función de este Juzgado analizar el tipo de régimen político que impera en Guinea Ecuatorial, pero sirviendo exclusivamente de referencia la legalidad democrática instaurada con la Constitución Española de 1978, se estima que hechos como los narrados en su declaración (con secuestros de personas exiliadas allende Madrid Guinea Ecuatorial para encarcelarlas en su país o, para no dar noticia de su paradero, marginando instrumentos jurídicos propios de un Estado de Derecho como los propios de la extradición, o el hecho de no haber entregado el poder al partido ¡legalizado que dirige el imputado, pese a haber reconocido haber ganado las elecciones) hacen verosímil el testimonio del imputado de temer por su vida precisamente por su papel de opositor el régimen político allí imperante, y verosímiles sus manifestaciones de que terceras personas confidentes o incluso funcionarios policiales españoles, le hayan informado de la presencia en España de personas adscritas al mismo que pudieran tratar de ”causarle problemas” y que la manera de contrarrestar su hipotética intervención delictiva de futuro (en el caso de autos se le había dicho que venía a asesinarle), sea desenmascarar sus identidades en la prensa; por lo que siendo este el caso de autos, se está en el caso de apreciar que las imputaciones manifestadas por el imputado constituyen además del ejercicio de su libertad de expresión, amparada por nuestra Constitución (art. 20.1 y 20.3 CE) un más que ejercicio de su autodefensa que constituye una causa de justificación de las manifestaciones cuya criminalidad se le imputa por el querellante, que deben, por encontrarse en un contexto político internacional claro de oposición al régimen instalado en Guinea Ecuatorial, no sólo entenderse como amparado y justificado en el lenguaje propio de los póliticos (y en ese sentido si estas expresiones se hubieran dicho entre oponentes políticos españoles en España igualmente hubieran conllevado al archivo) sino como expresiones en sí mismas no constitutivas de carácter injurioso hacia el Sr. Madiba Bolopa, porque se hacen en un contexto en el que la libertad de expresión y oponión es entendida por nuestra Jurisprudencia del Tribunal Constitucional con una mayor amplitud, porque los ciudadanos que las oímos, las interpretamos en ese contexto político, y por lo tanto sólo serían injuriosas si fueran reiteradas y hechas sin ninguna base, esto es, hechas exclusivamente con el carácter de atentar contra el honor de una persona (cosa que no concurre porque personalmente no se conocen querellante y querellado entre sí) y no movidas y motivadas por razones de autodefensa o de contenido y contexto políticos...”

Las criminales e irresponsables acciones de Obiang Nguema no son juzgadas y por lo tanto su impunidad hace que nadie le ponga freno a sus excesos. Actitudes como la de este juez español fueron muy comentadas a la salida, demostrando la eficacia de la razón sobre la violencia. Moto reunió a un puñado de responsables de su gobierno y partidos opositores y les animó a seguir en “esta dura y desigual lucha contra tiranía”.



Fuente: Gobierno en el exilio

¡Nota importante!
El contenido de los artículos publicados no refleja necesariamente la opinión de la redacción de guinea-ecuatorial.net
Véase también la declaración sobre el uso de seudónimos