Por Severo MOTO NSÁ
Madrid.- 1 de sepetiembre de 2005. Dos años después de la puesta en escena de un Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio, 29 de Agosto de 2.003 y cada año que pasa después, la existencia de un Gobierno al que el pueblo (los pueblos) de Guinea Ecuatorial pueden mirar con orgullo y esperanza se hace tanto más interesante cuanto más necesaria.

Escasos cinco días después de la aparición del Gobierno en el exilio de Guinea Ecuatorial, los Gobierno de los Estados Unidos de América, de Inglaterra, de Cameroun, Nigeria, Gabón, de España; la ONU, la U.A., recibían sendas cartas de presentación de esta realidad. Dos Partidos políticos de la oposición a la tiranía de Obiang Nguema (el Partido A.P.G.E. y el Partido PP) se comprometían a seguir el ejemplo de tantos otros países, de tantas otras formaciones políticas y de tantas ideas concebidas de que (ya que no era posible dentro del país, ni por negociaciones sinceras y abiertas ni por elecciones libres, justas y limpias) era necesario crear un Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio.

Hacía mucho tiempo atrás que la idea venía convirtiéndose en un reto político para el conjunto de la oposición guineana en el exterior. (- ¿” Sois capaces de crear un Gobierno en el exilio”?) Si a comienzos de los años 90, la oposición fue capaz de plantarle cara al tirano Obiang Nguema, con la llegada al país, desde el exilio, de Partidos Políticos (A.P.G.E. liderado por Miguel Eson Eman y PP bajo el liderazgo del que suscribe este artículo) para casi “imponer” el proceso de transición democrática en Guinea Ecuatorial, abortadas tan valientes y arriesgadas intenciones, era normal que a la oposición se le ocurriera una nueva iniciativa; por cierto, azuzada, como un reto, por potencias internacionales.

El “Partido del Progreso” y el Partido “Acción Popular”, tras varios encuentros con otras formaciones políticas guineanas, igualmente en el exilio, con la sana intención de aglutinar fuerzas de oposición a la tiranía de Obiang Nguiem Enem y erigirnos en una alternativa de Gobierno, decidimos tirar para adelante.

Qué duda cabe de que se trataba de un riesgo y de un reto. Los riesgos y los retos se han manifestado de forma bastante más que clarividente. La Ministra del Gobierno popular español se limitó a decir, ante el acoso de la prensa: “Es un fenómeno que vamos a estudiar”. El Gobierno socialista en el poder actual de España ha dejado sentir en las carnes del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio las heridas de un rechazo frontal, despectivo y absolutamente repelente.

Por fortuna, y aunque el Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio ha nacido y se fragua en España, tenemos la plena conciencia de que solo el pueblo (los pueblos) de Guinea Ecuatorial tienen el legítimo derecho a darnos la nota final: su SÍ o su NO.

Es muy fácil comprender, por eso, que dos años después de la “Estefanía” del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio (España) y, a pesar de todo, continuamos. Seguimos creyendo que vale la pena y vamos tejiendo en nuestra conciencia la convicción de que es necesaria una alternativa democrática clara e incontestable a la tiranía que asola y destroza nuestro país.

Lo más importante que puedo constatar en este Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio, dos años después de la puesta en marcha de la experiencia, es que encaja perfectamente con el futuro que cualquier guineo ecuatoriano podría desear o esperar para nuestro país. La presencia de un incontestable Ministro de Bioko; de una impecable Ministra del Litoral; de Ministros del Centro Sur...,la presencia de un Ministro español y las puertas abiertas a todo guineo o español, avala, ante cualquier buen observador guineano o extranjero atento, la idoneidad y buen camino del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio.

Sus nombres y sus profesiones están más que hartamente presentes, no solo en la HEMEROTECA de esta página WEB sino, especialmente en las firmas de artículos “con nombre propio” con que aparecen en esta privilegiada página.

Guinea Ecuatorial, nuestro regalado rincón africano, vive momentos de especial convulsión; Convulsión apagada, evidentemente por una tiranía que ni deja a nadie llorar a sus muertos. Ese silencio sonoro que va a explotar en cualquier momento, necesita encontrar una caja de resonancia capaz de ponerle sordina, control y salida suave (difícil) pero necesaria.

Todos los pronósticos sobre el fin de la tiranía desarrollada por Obiang Nguema hablan, con inquebrantable acierto, de que dicho fin se va a producir de forma explosiva, difícil de controlar y con consecuencias nefastas, precisamente para quienes menos han tenidos que ver...

He leído recientemente, en una de las páginas WEB sobre Guinea Ecuatorial, un llamamiento a los propios guuineoecuatorianos... Sí; los propios guineo ecuatorianos tenemos la palabra.

Desde la posición serena, humilde y abierta del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio, nos sentimos legitimados para ofrecer esta alternativa de Gobierno a todo guineo ecuatorial (... todos tenemos derecho a elegir y ser elegidos...) para que se sume y añada sus capacidades al proyecto del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio; puerta de entrada al necesario e imprescindible Gobierno de Unidad Nacional que espera nuestro país.

Dos años después de la creación del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio, si este proyecto se hubiera transformado en la realidad de un Gobierno de Unidad nacional en manos de genuinos hijos de Guinea Ecuatorial, arropados, como lo estamos, por ese equipo de españoles técnicos y profesionales a quienes hemos conquistado con nuestro acendrada hispanidad, desde luego hacía ya año y medio que hubiéramos celebrado las primeras elecciones libres, justas y transparentes de la historia de nuestro país.. Siempre hemos dicho que estas elecciones se producirían a los SEIS MESES de haberse producido el cambio.

Mi queridos compañeros de Gobierno en el exilio han tenido la feliz ocurrencia de trasladar a los lectores de esta WEB una respuesta sectorial a esta pregunta. ¿ Qué habría sido de nuestro país, si el Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio hubiera llegado al país y se hubiera transformado ya en Gobierno de Unidad Nacional?

De lo que no me cabe la menor duda es de que Guinea Ecuatorial y sus pueblos se habrían ya contagiado ( en dos años ) del espíritu de un equipo ciertamente guineo hispano de desarrollo y progreso.

Y si, como se viene comentando últimamente, nuestro poético rincón africano hubiera ofrecido su suelo a una soberbia Organización Internacional como sede africana en el Atlántico Sur, dos años después estaríamos ahora participando en la seguridad de la zona con ese proyecto de “G3” en el que Guinea Ecuatorial sería el gran eslabón-eje- africano de dicho plan de seguridad de la zona.

Un mensaje, en el segundo aniversario de la creación del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio (29-8-2003/2005):

El Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio, con todos los resortes humanos, técnicos, profesionales guineanos y españoles o extranjeros de que se ha rodeado en estos dos años, solo y únicamente obedece y obedecerá a la voluntad del pueblo guineano. Y ese “post Obiang” que venimos proclamando será tanto más eficaz y positivo cuanto más nos preparemos a participar en unas elecciones libres, justas y transparentes, SEIS MESES después de que se haya escapado, huido, escondido o muerto por suicidio el actual tirano de Guinea Ecuatorial, llamado Obiang Nguiem Enem.

Hoy por hoy solo tienen derecho y deber de desesperarse o peder la fe en el futuro los que se han manchado con los delitos de sangre y de lesa humanidad de Obiang Nguiem Enem. A medida que se desesperan y no saben dónde esconderse, los demás debemos resucitar nuestras ilusiones y esperanzas.

Hay un Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio. Llegará al país, más temprano que tarde. Nos veremos, como ya sabéis, en las calles, en las plazas de nuestras ciudades.

Dicen, los que saben de estas cosas, que ya queda poco. Nos toca estar listos y preparados para invadir nuestras calles y reclamar el fin de la tiranía y la llegada del cambio.¡ BASTA, YA!.¡ CAMBIO, YA!



Fuente: Gobierno en el exilio

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