Obiang va a llevar a Guinea Ecuatorial a una situación de extrema tensión a muy corto plazo.
La oposición, tendría que consensuar unas fuertes bases que garantizaran la democracia post-Obiang.
También, frente a la dictadura, empezar a plantear un frente unido entre todos, tal como es el esperanzador caso actual de la dinámica en torno al DECAM. Es muy necesario, casi imprescindible, porque lo que se nos viene encima es de cuidado y, una sola opción, no puede hacer frente a la situación, a menos que se venda a intereses exteriores, como Obiang.
Nos podemos preguntar ¿porqué?
Porque, repito, lo que se nos viene encima es una situación extremadamente grave.
Los franceses, con el Informe del Primer Ministro Villepin sobre el futuro del sector energético y el ministerio responsable de los sectores de energía y petróleo, ya se han cuestionado el futuro energético y el del sector del petróleo. Y han tenido su debate, pese a que en Francia, ese sector, es independiente con sus propios recursos en un 50% (en España, se nos informa que tal grado de independencia solo llega a penas al 20%).
¿Y qué se han planteado los franceses y no se han planteado los españoles o qué no les han planteado el gobierno de las Españas a los Pueblos de las Españas?
Pues que existe un grave problema a medio plazo en el del suministro de petróleo, en su encarecimiento, que ya causa actualmente problemas en varios sectores.
Se discute sobre el momento en que la subida de precios del crudo (puesta de manifiesto tempranamente pero ”temporalmente” con el Katrina) pueda dispararse ya de una manera descontrolada y sin posibilidad, ya, de satisfacer todas las necesidades.
Es decir, se investiga sobre el momento en el que los incrementos de una demanda siempre en aumento (1,6% de crecimiento medio anual de los últimos años, según la AIE Agencia Internacional de la Energía), pueden superar ya ampliamente los incrementos de la oferta, al crecer esta nueva oferta solo en 14.000 millones de barriles anuales.
Recordemos que estamos hablando de petróleo, un recurso que no se puede fabricar, que ya está en la naturaleza y en un monto dado. Hablamos de que los incrementos de las nuevas explotaciones, ya no puedan hacer frente a la nueva demanda y, de ese modo, la DEMANDA empiece a ir por delante de una OFERTA rígida y limitada en su crecimiento oferta.
Para los profanos, en un mercado de un determinado bien (p.e. el crudo), en la formación del precio intervienen la Demanda (D) y la oferta del mismo (O)
Si la D = O se dice que el mercado está equilibrado. Los precios pueden mantenerse.
Si la D < O, es decir, la demanda es menor que la oferta, los precios incluso podrían bajar.
Si la D > O, es decir, la demanda D (y sus incrementos) ES MAYOR que la oferta (O) y sus incrementos, los precios pueden ir para arriba.
¿De qué manera?
Depende de las circunstancias en que la oferta de crudo –ya se ha dicho limitada – pueda hacer frente a una no elástica demanda.
Podríamos decir que depende, en parte (“Teorema de la Telaraña”) de las elasticidades de la demanda agregada y de la oferta agregada pero, siendo lógicos, podemos inferir que, dada la limitación de la oferta –al ser el petróleo u recurso natural no reproducible – la subida de precios puede desbocarse a partir de un determinado umbral, a partir de un punto de inflexión.
¿Cuando se producirá el ”punto de inflexión” hacia una ”subida galopante”?
Los franceses lo fijan en el 2030, pero los problemas aparecerán antes. El Katrina ha sido un buen emisario de los mismos. Hay quien no hace caso o no sabe leer o está demasiado plegado a intereses a muy corto plazo de las petroleras o de las industrias de ”bienes complementarios” (coches, aviones, ...formas de urbanización que requieren grandes desplazamientos al punto de trabajo, ...).
¿Cuando empezará realmente el problema a sentirse en los menos independientes en el sector energético, como las Españas, o con elevadísimos consumos de petróleo, como los EEUU?
¿Cuando la nueva extracción de crudo (O) puede quedar en inferioridad frente a los nuevos requerimientos de la demanda (D) y, entonces, esa demanda no satisfecha produzca una alocada carrera de precios del crudo hacia arriba, ante un incremento de la oferta que ya no le puede dar satisfacción?.
No se está hablando ya del agotamiento del petróleo, se trata de acometer y ser conscientes de un problema anterior, muy anterior al del agotamiento de las fuentes del petróleo. Se trata del problema de si las nuevas reservas pueden hacer frente a la nueva demanda; el problema es aquel que se produce cuando los incrementos de demanda superen, ya de una manera clara, a la nueva oferta de crudo derivada de nuevas exploraciones puestas en producción, muy lejos todavía de su agotamiento.
Los especialistas han fijado ya varios escenarios, unos más pesimistas, otros menos pesimistas, pero todos coinciden en un entorno de fechas que van del 2013 al 2030. Hay otros, ya desechables por excéntricos e increíbles, fundados en unas bases nada realistas, que lo fijan en el 2.125. Estos últimos se creen que estamos en una maratón, cuando estamos en una carrera de 10 mil metros donde, probablemente, ya han sonado los avisos de ”última vuelta” (Katrina).
Los escenarios entonces van desde el más pesimista, con un incremento de la demanda mundial de crudo del 3% y una nueva oferta de reservas explotables puestas en nueva explotación de 10.000 millones de barriles año y que fijan el año de ”inflexión” en el 2.013, año en que la ”civilización del petróleo” se empieza a ir a hacer puñetas, aun con un bombeo de 97 millones de barriles de petróleo diarios (mbd).
Es decir, con 35.405 millones de barriles año (97 mbd) de bombeo y unos incrementos en las nuevas reservas puestas en explotación, cada año de 10.000 millones, en el 2.013 la demanda empezaría a dejar muy atrás a la oferta, a esa oferta ya de 45.405 millones de barriles año.
Otros escenarios son menos pesimistas, incluso se podría decir optimistas, suponiendo un aumento de la demanda de crudo del 0% (cero zpatatero), con un consumo de 79 mbd y unos ”nuevos descubrimientos productivos” de 50.000 mba, ese punto de inflexión hacia “una subida de precios ya galopante” sería en el venturoso 2.110. Un siglo después.
Pero este optimismo, parece que, según los datos de la aterradora y negada realidad, es, al parecer, totalmente infundado.
¿Por?
Como ya se dijo, la AIE cifra el consumo para el 2005 (evaluado en el primer trimestre del año, es decir, que todavía puede dispararse más) en 86,1 mbd (datos ya actuales que dejan muy lejos las previsiones optimistas), y un crecimiento de la demanda del 2,2% muy superior, también al 0% de los optimistas. Por otra parte, pensar que las nuevas incorporaciones, las nuevas explotaciones puestas en producción - supuestas en esta versión optimista - puedan elevarse a 50.000 mba es algo que superaría casi lo aceptable si la comparamos con una cifra ya equivalente de producción actual. Las nuevas explotaciones puestas en producción son, cada vez, menores en producto. Se sabe por estadísticas.
Con datos realistas, de la misma AIE, la ”subida desenfrenada” se situaría entre el 2.018 y el 2.027.
Pero es claro que ante lo que se vaya poniendo en evidencia (la escasez relativa) las cosas -por el mecanismo del mercado que se empeña DESCONTAR Y ADELANTAR acontecimientos (hay incluso un mercado de futuros) - empiecen a notarse antes, tal vez en el 2.010 los precios empiecen a notar fuertes empujones irrefrenables hacia arriba.
DENTRO DE MENOS DE CINCO AÑOS.
Y no se ha previsto nada en algunos países de Europa Occidental, ni en los EEUU, con una cultura basada en el altísimo consumo de energía.
¿Acabará por tener razón la cultura hindú con lo de la vaca sagrada de la que nos hablaba Marvin Harris en su libro ”Vacas, cerdos, brujas y guerras”?.
Lo que si está claro es que en los próximos años, crecerá la tensión por el crudo, por su suministro, por asegurarlo, por propiciar amigos donde fluya, al margen de los pueblos que sufren de su proximidad.
Y habrá violencia extrema, la propiciarán, propiciarán enfrentamientos, crueldades, traiciones, con tal de tener acceso al crudo. Y habrá que hilar muy fino si se quiere un sistema democrático con garantías y la permanencia en el mismo porque, de otro modo, hay unos enormes intereses que -si estamos desunidos o no sentamos unas bases firmes- van a venir por nosotros de una manera clara, van a venir por nuestro petróleo sin piedad. Ya nos han demostrado que no consideran en nada a los pueblos de GE, somos carne de cañón para Occidente, el que ahora extrae petróleo o en que tiene opciones de extraerlo.
Sencillamente, no somos nada ante ellos. Así son las cosas.
Deberíamos renunciar a caudillismos, liderazgos, exclusivismos, aventuras solitarias, ...
Una sola opción NO PODRÁ HACER NADA, a menos que SE VENDA A ALGÚN PODEROSO.
Es necesaria una alternativa plural democrática, con garantías de democracia y libertad para todos, DE TODOS los guineanos. En otro caso, asistiremos a un espectáculo de titiriteros -violento siempre, ya en modo directo, ya por violentar la voluntad de los pueblos - con un gobierno títere - como el actual - paseándose por toda la retahíla de crímenes contra la humanidad habidos y por haber.
La posibilidades de maniobra de una oposición unida son, incluso unida, problemáticos.
¿Qué no lo serán para los que no persigan la unidad y se embarquen en aventuras solitarias y exclusivas ante lo que se nos viene encima?
Con las bases como las del Compromiso Histórico, tendríamos también que superar dificultades ante la ola que se nos viene encima.
¿Qué dificultades ya insuperables tendremos si no adoptamos unas salvaguardias democráticas, como las de las bases del Compromiso Histórico?
Se requiere una unidad como la emprendida por DECAM y se requieren unas bases para hacer frente al tsunami que se avecina, ya en el 2013, ya en el 2.030, ya en el 2.010.
2.010, una odisea ¿a la democracia?.
Carlos Jorge de Moganda
Liga Espartaco.
Economista del Foro Solidario por Guinea Ecuatorial.
DECAM
Fuente: Informes y datos oficiales y propia.
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