Por: Samuel Mbá Mombé (Médico)

La decisión del Ejecutivo del Gobierno español de revocar el estatuto de asilo político al opositor guineoecuatoriano Severo Moto Nsa es políticamente estúpida ya que hace un flaco favor al proceso jamás iniciado de democratización de Guinea Ecuatorial. La huida hacia adelante del ejecutivo español es una clara manifestación de lo que calificamos en su día de contubernio entre éste y la dictadura de Teodoro Obiang Nguema. Los argumentos fantasmagóricos evocados por el Gobierno español para llegar a tal decisión muestran claramente la actuación hipócrita de los sucesivos gobiernos del Reino de España en la toma de decisiones respecto a su ex-colonia. El fracaso de la política de España en Guinea Ecuatorial desde el vergonzoso proceso de descolonización hasta la fecha no deja lugar a dudas para que los guineoecuatorianos nos demos cuenta de una vez por todas que la solución de los problemas que azotan a nuestro país está en nuestras propias manos.

La ilusión que tienen algunos compatriotas de que España o la llamada Comunidad Internacional vendrían a poner fin a los sufrimientos de nuestro pueblo debe ser enterrada definitivamente. Se ha dicho por enésima vez y así lo demuestra la experiencia que los llamados países democráticos sólo están interesados en los recursos naturales de los países pobres para sus propios intereses y les importa un bledo la miseria que puedan pasar sus poblaciones. Guinea Ecuatorial es hoy en día un país rico en petróleo, gas y demás minerales lo que ha despertado el interés de los países ricos y aparentemente democráticos. Pues, éstos con el único objetivo de participar en el reparto del pastel, han olvidado de la noche a la mañana que el régimen de Teodoro Obiang Nguema es una de las más abominables dictaduras del mundo en general y de Africa en particular. De entre esos países aparentemente democráticos se encuentra España que quiere a todo precio participar en el festín. Es a partir de esta cruda realidad debemos situar la descisión del Gobierno español respecto al estatuto de asilo del compatriota Severo Moto Nsa. Estoy más que convencido de que otros exiliados políticos guineanos en España van a correr la misma suerte.

Curiosamente el Gobierno español descubre de repente lo que es la violación de los principios de las Naciones Unidas para justificar las razones de la revocación del estatuto de asilo de Severo Moto Nsa olvidando que el régimen de Guinea Ecuatorial es campeón precisamente en la violación y no respeto de las resoluciones de las Naciones Unidas en materia de Derechos Humanos y de las Libertades democráticas. No es extraño que cuando la Comunidad Internacional condena a la dictadura de Guinea Ecuatorial, su Presidente, Teodoro Obiang Nguema ha sido siempre recibido apoteósicamente por las Altas Instituciones del Estado español. “Dime con quién andas, y te diré quién eres”.

Lo que debe quedar claro es que sólo nosotros los guineanos decidiremos cómo vamos a poner fin a la miseria y a los sufrimientos de nuestro pueblo y que nunca aceptaremos dictámenes foráneos. Nosotros pondremos fin a la dictadura utilizando cualquier método con tal que ese fuera eficaz para conseguir este objetivo. Nosotros no vamos a esperar cuarenta años ni la transición española es modélica por razones obvias para Guinea Ecuatorial. Con el beneplácito del Rey de España, Macías fue derrocado por las armas por Teodoro Obiang Nguema con la instauración de un régimen dictarorial que nada tiene que enviadiar al de su tío y que hoy en día se mantiene a flote gracias a los apoyos directos o indirectos de las Altas Instancias del Estado español.

El Pueblo de Guinea Ecuatorial eleigirá el camino que considere idóneo para poner fin a la dictadura. No es España que debe juzgar a los guineanos por optar por tal o cual camino para democratizar el país. El pueblo de Guinea Ecuatorial tampoco aceptará que se le imponga regimenes prefabricados desde el exterior para seguir manteniendo el status quo. Guinea Ecuatorial necesita una apertura democrática real con la participación de todos sus hijos sin discriminación de ninguna clase y que sea el pueblo soberano que elija a sus futuros dirigentes a través de las urnas en unas elecciones libres y transparentes.

Si a España le interesa seguir ocupando un lugar priveligiado en Guinea Ecuatorial por razones históricas que nos unen, debería condenar públicamente y sin ambajes la barbarie impuesta en nuestro país y reconsiderar decisiones como la tomada respecto a nuestro compatriota Severo Moto Nsa. Nuestro Pueblo toma buena nota de todo y llegado el momento pasará la factura a cada uno deacuerdo a sus actuaciones.


Fuente: LD

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