OBIANG NGUEMA MBASOGO INDULTA A LOS EXTRANJEROS CONDENADOS POR INTENTO DE GOLPE DE ESTADO EN 2004

3 Noviembre de 2009.-
El presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema, mediante dos decretos emitidos hoy 3 de noviembre, ha indultado a cinco extranjeros condenados por un supuesto intento de golpe de Estado en marzo de 2004. Estos incluyen al sudafricano Nicolaas (Nick) du Toit y al británico Thomas Mann, quienes serán liberados en pocos días.

A través de dos decretos, publicados en la página oficial espanol.guinea-equatorial.com, el presidente Obiang ordena el perdón, la liberación y la expulsión de los cinco extranjeros condenados en 2004 y 2008 y que se hallaban recluidos en la cárcel de Black Beach en Malabo.

Una declaración del gobierno explica que la liberación de los golpistas está relacionada con la visita oficial del presidente sudafricano Jacob Zuma, a Guinea Ecuatorial, a partir de mañana día 4.

El primer decreto, intitulado
”DECRETO Núm. 116/2.009. de fecha 2 de noviembre, por el que se otorga Indulto total por razones Humanitarias al condenado SIMON FRANCIS MANN”,
se centra exclusivamente en el británico Simon Mann (de 57 años), que en su caso confesó ante la Justicia en 2008 - presuntamente tras fuertes torturas - su papel clave en el supuesto intento de destronar del poder al totalitario presidente de Guinea Ecuatorial.

El decreto que se refiere a Mann detalla ”un indulto total por razones humanitarias” del ciudadano británico. ”El estado de salud de Mann” y su ”necesidad de ser sometido periódicamente a tratamiento médico” se perfila como el principal motivo para ser liberado. Si bien fuentes judiciales en Guinea Ecuatorial mantienen que Mann se encuentra ahora en buen estado de salud tras haber sufrido una operación de hernia en 2008, las duras condiciones en las cárceles de Guinea Ecuatorial se consideran a menudo como un riesgo constante para la vida de los reclusos.

Una vez puesto en libertad, Mann recibirá la orden de abandonar Guinea Ecuatorial, rumbo a Gran Bretaña, en un plazo de 24 horas. El británico tiene denegado el acceso a los países de la región de África Central para el resto de su vida. Fuentes judiciales en Malabo indican que Mann será liberados entre el miércoles 4 o el jueves 5.

El siguiente decreto firmado por Obiang Nguema (117/2009) se dirige a cuatro ciudadanos de Sudáfrica: Nicolaas (Nick) du Toit, Sergio Patricion Cardoso, Jose Passocas Domingos y George Núñez Alerson. Los cuatro fueron condenados a 17 años de prisión en 2008 por ser parte del supuesto grupo de mercenarios que iban a participar en el presunto golpe de Estado de 2004.

También fueron indultados por ”razones humanitarias”, teniendo en cuenta ”el tiempo en prisión y la necesidad de reiniciar sus vidas”. Todos habían mantenido un buen comportamiento en prisión y ”dado pruebas fidedignas de su arrepentimiento”.

A los cuatro sudafricanos también se les ordena salir de Guinea Ecuatorial en un plazo de 24 horas después de su liberación y volver directamente a su país de origen. A su llegada a Sudáfrica, sin embargo, pueden tener que responder ante la justicia de Sudáfrica ya que las leyes nacionales prohíben estrictamente las actividades mercenarias. De este modo, puede que en su país de origen les espere otra condena.

Las autoridades de Guinea Ecuatorial sostiene que Mann, du Toit y sus presuntos mercenarios eran personas claves en la supuesta intentona golpista. Según los testimonios aportados por Mann, Mark Thatcher, hijo de la ex primer ministro de Gran Bretaña Margaret Thatcher, habría sido el autor intelectual, junto con unos dirigentes exiliados de Guinea Ecuatorial que viven en España. Thatcher, que mantiene su inocencia, es buscado por los tribunales de Guinea Ecuatorial y ha sido multado por la justicia de Sudáfrica por haber pagado el alquiler de un helicóptero.

El anuncio de la concesión del indulto a los conspiradores del golpe de 2004 ha llegado como una gran sorpresa tanto para los encarcelados como para sus familias. Se cree que la Presidencia de Sudáfrica ha presionado para asegurar su liberación antes de la visita -a su vez sorprendente-, del presidente Zuma a Guinea Ecuatorial.

El indulto, sin embargo, sólo incluye a los cómplices extranjeros en la presunta trama golpista. Un gran número de guineoecuatorianos fueron también encarcelados por la supuesta trama golpista, en lo que se consideró como un ataque más contra la oposición del país.

Mientras tanto, el número de presos políticos en Guinea Ecuatorial sigue siendo elevado y aún no hay espacio para una verdadera oposición política en el país, que ha sido gobernado por Obiang desde 1979, cuando derroco a su tío, el entonces presidente Macías Nguema, a través de un sangriento golpe de Estado en el que Macías fue fusilado.

El juicio por el golpe de Estado del 2004 adoleció de graves deficiencias procesales. A los supuestos golpistas que se encontraban en Guinea nunca se les halló ni armas, ni planos, ni nada que pudiera servir de prueba de que ellos fueran la avanzadilla de los mercenarios, aparte del hecho de ser sudafricanos. Formaban parte de una empresa cuyo socio principal era Armengol Ondo Nguema, el hermano de Obiang Nguema.

Simon Mann fue secuestrado y llevado a Guinea desde Zimbabwe. En Harare unos policias dijeron al jefe de cárcel que iban a trasladar a Mann a otra carcel durante una noche, en la que embarcaron a éste en un avión guineano que estaba esperando para la ocasión. Siempre se adujo que fue una extradición pero en los momentos en que se produjeron los hechos, marzo de 2004, no existía ningún acuerdo de extradición entre Zimbabwe y Guinea Ecuatorial, con lo que no podía aplicarse el acuerdo que se firmó meses más tarde en base al principio universal de NO retroactividad.

Mann fue secuestrado y juzgado en Guinea en el 2008 tras cumplir condena en Harare por ”haber intentado comprar armas de forma ilegal”. Fue juzgado en un juicio, en compañía de unos guineanos a los que se acusaba de tenencia ilícita de armas en 2008, es decir que a unos les juzgaban por una cosa sucedidad en 2004 y a otros se les juzgaba de otra cosa sucedida en 2008 en un único proceso, algo totalmente aberrante y que solo se ha producido en Guinea Ecuatorial. Prueba palpable de que la justicia en Guinea es una pura ficción.



Fuente: espanol.guinea-equatorial.com

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