La errática y estúpida diplomacia de Teodoro Obiang Nguema.

Guinea Ecuatorial viene sufriendo una diplomacia errática desde su independencia: primero con Francisco Macías Nguema y luego con Teodoro Obiang Nguema, a quien Macías otorgó todos los poderes, un militar mediocre y criminal autor de la mayoría de las atrocidades cometidas en la tétrica cárcel de Black Beach en Malabo y que hoy en día se autoproclama, sin escrúpulo, dictador ante los medios de comunicación tanto nacionales como internacionales.

Una de las estupideces como tantas que viene cometiendo con la fuerza desde 1979 es nombrarle a Manuel Bibang embajador de Guinea Ecuatorial ante Marruecos aunque ambos gobiernos son déspotas dictatoriales. Cabe recordar que Manuel Bibang había sido, hace poco, embajador de Guinea Ecuatorial en Libreville Gabón donde este inepto protagonizó una pelea en plena calle machete en la mano contra su señora.

Gracias a la intervención de la gendarmería y policía gabonesas, no pudo consumar su asesinato hasta llegar a una desgracia. El gobierno gabonés un poco más civilizado y coherente tomó carta en el asunto solicitando amigable mente la retirada de este embajador de Libreville como persona non grata.

Resulta que tras la vuelta de este individuo a Malabo, el dictador Obiang Nguema vuelve a solicitar un plácet a nombre de este canguro para nombrarle embajador en marruecos. Este es el dictador que tiene a un montón de funcionarios con carrera diplomática aburriendo y matando moscas en las cloacas de su ministerio de asuntos exteriores.

Lo mismo está haciendo ahora solicitando el plácet a la señorita Cruci, hija de enferma del criminal ministro Alenjandro Evuna Owono, otro enfermo con cáncer de próstata como en propio Obiang Nguema para que su hija sea la futura embajadora de nuestro país ante el Reino Unido. Esta señorita sin ningún estudio es una torpe analfabeta. Curiosa desfachatez del dictador Obiang Nguema.

La señorita Cruci se la destinó en Bruselas a petición de su padre porque padece de una enfermedad crónica por la que los médicos aconsejan su estancia en los países occidentales para revisar frecuentemente su estado de salud. Y que hoy en día el dictador la quiere nombrar embajadora de Guinea Ecuatorial ante una potencia.

Que Dios nos coja de pie o muerto.

Reinaldo Belope Edú.


Fuente: Reinaldo Belope Edú

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