Kenia: La salida del Trbunal Penal Internacional sería trágica para África.

The East African (Kenya), por Desmond Tutu , 14 de octubre 2013

Los líderes africanos que se encuentran detrás del movimiento para sacar al continente de la jurisdicción de la Corte Penal Internacional, en realidad están buscando una licencia para matar, mutilar y oprimir a sus pueblos, sin que existan consecuencias.

Dicen que los líderes africanos no deben permitir que los intereses del pueblo se pongan en el camino de sus ambiciones personales. Tener que rendir cuentas interfiere con su capacidad para actuar con impunidad. Los que se pongan en su camino deben permanecer sin rostro y sin voz . Argumentan que la regla de oro de la reciprocidad no debe aplicarse a ellos. Y tampoco debe aplicarse ningún sistema legal.

Pero saben que no pueden decir estas cosas en público, y por dicen que el TPI es racista.
A primera vista, cuando se cuenta el número de africanos en comparación a los europeos y norteamericanos que han sido procesados ​​por el tribunal, su argumento podría parecer plausible. En cambio cuando se analizan los hechos , uno se da cuenta rápidamente de que el número de africanos llevados a juicio es una expresión acusadora sobre el mal gobiernoa y la falta de democracia en algunos países, no se debe a la Corte Penal.

Cuando miles de personas son asesinadas y desplazadas en cualquier país, se espera que los sistemas judiciales de esos países reaccionen para corregir los fallos . Pero cuando ese país no está dispuesto o es incapaz de administrar justicia , ¿quien debe representar los intereses de las víctimas?
Los acusados ​​por crímenes proclaman su inocencia y vilipendian al TPI tachandolo de racista e injusta. Los ocho procesos presentados ante el tribunal fueron iniciados por los mismos países africanos y sus dirigentes. No hubo caza de brujas o imposición, se invitó a los jueces e investigadores.

Así que mientras la retórica de los líderes de la Unión Africana puede aludir a racismo y a colonialismo, los hechos son claros . Lejos de una ” caza de brujas del hombre blanco ”, el TPI no podría ser más africano si lo intentera.

Más de 20 países africanos ayudaron a fundarla . De los 108 países que inicialmente ingresaron en la Corte Penal Internacional, 30 son africanos . Cinco de los 18 jueces de la Corte son africanos , como es el vicepresidente. El fiscal jefe , que tiene un enorme poder sobre los casos que se llevan adelante, es de África . La Corte Penal Internacional es, literalmente, la corte de África.

Abandonar el TPI sería una tragedia para África por tres razones. En primer lugar, sin justicia , los países podrian atacar a sus vecinos o a las minorías en sus propios países, con impunidad.

Hace dos años , cuando el señor de la guerra Thomas Lubanga fue arrestado por cargos de reclutar niños soldados , la amenaza de la Corte Penal Internacional socavó a otras milicias. En Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, ya fue llevado a enfrentarse a la justicia en La Haya, el país se ha reconstruido. Sin ella, no habría freno a los peores excesos de los delincuentes. Y estos líderes violentos siguen afectando a África. A los perpetradores de la violencia no se les debe permitir la libertad.

En segundo lugar, sin justicia no puede haber paz. En Sudáfrica, se ha llevado a cabo un largo proceso de verdad y reconciliación para que las heridas del apartheid comiencen a sanar. En Kenya, las heridas de la violencia post- electoral tardarán mucho tiempo en sanar. En pocas palabras, en aquellos sitios en los que no se restablece la justicia y el orden, no puede haber curación , dejando la violencia y el odio marcando como una bomba de tiempo.

En tercer lugar, la forma en que África puede encontrar su voz en los asuntos mundiales, debe ser mediante el fortalecimiento de la justicia y el imperio de la ley, no socavandola . Toda persona tiene el deber de cumplir con estos principios , ya que son parte de la responsabilidad colectiva global, no son un menú que podemos elegir y cuando nos conviene .

En este momento , miles de personas de todo el planeta se están uniendo en una campaña organizada por Avaaz , una organización internacional de defensa para llamar a los líderes de África a permanecer en el TPI y están detrás de la justicia internacional y lo que significa para muchos ciudadanos vulnerables en todas partes.
Estas personas representan nuestro compromiso mundial de trabajar juntos para hacer un futuro más brillante y más seguro para las generaciones futuras.

Las alternativas al TPI son demasiado dolorosas : la venganza , como sucedió en Ruanda , Kosovo , Bosnia, o una amnistía general, que es un compromiso nacional para una amnesia, como pasó en Chile . La única forma en que un país puede hacer frente a su pasado es haciendolo frente .

Necesitamos voces en Addis Abeba para entregar el mensaje de los pueblos del mundo, para callar a los que quieren que no hagamos nada . En la vanguardia, necesitamos a los pesos pesados de África - Sudáfrica y Nigeria - a ejercer su liderazgo y detener a aquellos que no les gustan las reglas.

Si las democracias de África realmente creen en la justicia y el imperio de la ley, deben hacer frente a estos intento por parte de sus hermanos y hermanas menos democráticas para socavar esos valores.

La reunión de Addis es un enfrentamiento entre la justicia y la injusticia. Lejos de una pelea entre África y Occidente, esta es una lucha dentro de África , por el alma del continente.

* Desmond Tutu es un premio Nobel .

Fuente: Desmond Tutu. The East Africa

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