SÍ, SOY DICTADOR PORQUE DICTO LAS NORMAS.
J.L. Nvumba.
Una vez más el auto-reconocido y orgulloso “Dictador” haciendo uso de las prerrogativas que le confiere “su” Ley Fundamental del Estado en materia de revisión constitucional ha creído a bien constituir la que llama “Comisión Nacional para el estudio de la reforma de la Ley Fundamental de G.E.”, mediante el dictado del Decreto nº 84-2011 de 9 de mayo que luce orgulloso en su página web oficial.
Lo primero que uno se pregunta es qué le ha llevado al insufrible Dictador de G.E. a emprender una reforma de SU LEY FUNDAMENTAL, ya que es sólamente suya, habida cuenta que ningún ciudadano libre de la llamada República de Guinea Ecuatorial ha tenido nunca la posibilidad de expresar su voluntad política, en nigún ámbito nacional, desde que el “ensayador democrático”, autoproclamado y reconocido dictador se hiciera con el Poder tras el Golpe de Palacio del 3 de agosto de 1979.
Intentando hallar, en buena lid, una respuesta razonable, me he tomado la molestia de leerme la Exposición de Motivos del mencionado Decreto para encontrarme con una motivación kafkiana, surealista y de lo que consideraría fino humor, que no conduce en este caso a la risa franca únicamente porque cada día que pasa la inmensa mayoría de los guineoecuatorianos padecen y sufren intensamente el malsano sistema que desgobierna y destroza nuestras vidas y haciendas. Ya sean exhorbitantes las cantidades que el autoreconocido Dictador se gaste en asesores y campañas de imagen, nada puede conducirle a su limpieza, porque es en sí mismo intrínsecamente sucio y malsano. Sólo puede llevar al engaño a quien no quiera ver la triste realidad: que en G.E. hay vigente, hace demasiados años, un “régimen político” que viola sistemáticamente los derechos humanos y somete cotidianamente a las personas a una condición próxima a la más pura animalidad ( dicho sea con perdón del dignísimo reino animal), sin concesión alguna a la dignidad inherente a todo ser humano.
Se permiten en la exposición de Motivos “justificar” la pretensión de reforma constitucional en una supuesta... “rica experiencia adquirida por el Pueblo de G.E. (¿ qué pueblo, el formado por su familia y acólitos?), las fuerzas políticas de la nación( ¿se referirán a la indudable fuerza, meramente bruta, de su PDGE, que desde su nacimiento recibe cuotas forzadas de los humillados súbditos?) y las instituciones públicas y administrativas establecidas conforme a la voluntad del pueblo ( ¿existe en G.E. alguna institución digna de este nombre – si tan siquiera se ha querido articular un poder judicial profesional e independiente- o algo parangonable a lo que se conoce universalmente como administración pública, si no es de modo meramente nominal y formal?¿ cúando lo que denominan pueblo ha podido expresar libremente su voluntad y participar, como ciudadanía, en la cosa pública?) para instaurar el pluralismo político en el país desde la puesta en vigor de la reforma Constitucional de 1991” (¿pluralismo político en un sistema que sigue matando, torturando, deteniendo sin fundamento jurídico, corrompiendo y robando impunemente, persiguiendo a cualquier persona o entidad que manifieste su disidencia política y, a la postre desarticulando cualquier atisbo de tejido social, incluso en el ámbito más doméstico?).
Después se alude a una presunta “...madurez política adquirida desde entonces por el Pueblo de G.E.,..., ensayando en lo posible todas las prácticas de las democracias modernas, lo cual aconseja hoy ampliar en lo máximo el marco jurídico del ejercicio de todas las libertades, etc etc...”. Una vez más hemos de recordar los dichos : NO HAY PEOR SORDO QUE EL QUE NO QUIERE OIR, NI PEOR CIEGO QUE EL QUE NO QUIERE VER. A ver, Sr. Obiang Nguema, próximos y acólitos: la democracia no se ensaya, simplemente se practica y vive. Quítese de la cocorrota eso de “ENSAYO DEMOCRÁTICO”, porque es una entelequia infumable, insostenible que apenas esconde lo que tenemos en la cabeza, “ afán absolutista ilimitado y verdadero pánico a la libertad y a la democracia de los mal gobernados”. Es como cuando se le ocurrió autocalificarse de dictador por ser quien dicta las normas. Dese ya cuenta que cada vez que alude a eso de “ensayo democrático” está haciendo el ridículo intelectual y políticamente. Dese también cuenta que las libertades públicas rigen o no rigen, no engaña a nadie aludiendo a su ampliación, únicamente está reconociendo su real inexistencia. Si sólo la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 , vigente en G.E., se respetara y fuera eficaz en el país, le aseguro que nadie pondría en duda que en su régimen las personas son tratadas por los poderes públicos con la dignidad y el respeto que les son inherentes. Le aseguro, también, que no estaríamos más de un tercio de los guineoecuatorianos en la diàspora y no tendría usted motivo alguno para quejarse de los “rencorosos o envidiosos intelectuales, estudiantes y ciudadanos exiliados y expatriados”.
Qué decir de la calidad de árbitro y moderador de un presunto proceso democrático que se atribuye el autoreconocido como Dictador: señor autodictador, un árbitro y moderador primero ha de ser libremente designado, luego imparcial, no puede ser el líder de uno de los equipos que compiten y, sobre todo, ha de entender, aceptar, aplicar y aplicarse las reglas de juego que han de ser iguales para todos. En caso contrario, como su labor está sometida al principio de responsabilidad, el Comité de Competición, organismo independiente y libre, le ha de poder sancionar si incurre en parcialidad, deslealtad, desconocimiento de las normas y, no digamos, en corrupción.
Nos puede parecer bien que se autoproclame Dictador, además que sin duda lo es, pero comprenderá que, en cuanto personas librepensantes y dignas, nos permitimos NO RECONOCERLE, EN ABSOLUTO, COMO ÁRBITRO, NI MODERADOR. Además tampoco podemos reconocer que en ningún momento de su desgobierno hubiera emprendido proceso democratizador alguno, ya que un proceso de esta índole es incompatible con un clima de absoluta falta de garantías y libertades ciudadanas, así como con el imperio de la absoluta impunidad de los responsables de los abusos que denunciamos.
En fin, en uso de sus atribuciones como único y autoproclamado DICTADOR, se permite Usted la gracia, ríase ya que nosotros no se la encontramos, de constituir una Comisión ¿¿¿Nacional???, para la Reforma, posiblemente ya debidamente prevista por Su Excelencia Divina Omnipotente, S.E.D.O., de “su” estimada Ley Fundamental. En uso de dichas gracias y atribuciones se permite escoger de entre sus “súbditos” los que ha considerado que mejor le servirán a SU MAYOR GLORIA. Espero, insinceramente, que no se lleve S.E.D.O. el disgusto de que a algún “súbdito” de sus designios le salga rebelde y contestón, aunque fuera sólo a la muy humilde mayor gloria, y gracia, de los sufridos y oprimidos, pero SIEMPRE DIGNOS, Pueblos de G.E.
José Luis NVUMBA, simple ciudadano de a pie. Barcelona, mayo del 2011


Fuente: propia

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