Por Celestino Okenve
29 agosto 2022
Teodorín Nguema Obiang,
tras dirigirse con aparente ira a los directivos de los puertos el
jueves día 25, acusándoles de prevaricación y desviación de
fondos, decretó el cese y nombramiento de varios altos funcionarios
del ejército y la seguridad. Tras ello, por la noche salió de
Guinea para veranear en la isla de Cerdeña (Italia), pasando por
Lisboa. En Lisboa permaneció desde el día 26, sin saber exactamente
cual es la razón de su estancia de 4 días en la capital portuguesa.
Su
yate, el Ebony Shine no se halla lejos de la ciudad de Olbia, en la
isla de Cerdeña, donde ha aterrizado esta noche del dia 29
procedente de Lisboa.
Teodorín
es tan manipulador como su padre. Antes de esta salida a sus
vacaciones, que toma con bastante frecuencia en islas paradisiacas,
hizo difundir la idea de que el Banco Central de Francia impide las
transferencias de dinero de Guinea hacia el exterior y eso afecta a
la CITGE, la institución encargada del acceso al exterior de la red
internet guineana y, con ello, peligra la conexión a internet. Está
claro que la dictadura planea llevar a cabo un apagón de internet y
así hacer frente a las movilizaciones populares contra las próximas
elecciones.
Mientras
Guinea no dispone de aviones para hacer la ruta Malabo - Madrid,
Teodorín viaja en el lujoso B777, el último avión comprado por
Guinea. La matrícula de este avión es P4-SKN, una matrícula de las
islas Caiman. Su yate, el Ebony Shine también tiene bandera de las
islas Caiman. No es pura casualidad.
Y
para colmo del despilfarro que contradice su ira por la malversación
de fondos públicos, viaja siempre en compañía de al menos otro
avión, en esta ocasión con el B737 presidencial de lujo 3C-EGE.