FUERZA DEMOCRATA REPUBLICANA
F. D. R.
DE GUINEA ECUATORIAL
Secretaría General
Departamento de Prensa e Imagen
Militantes de FDR exiliados en Benín detienen y entregan a la policía a un espía de nacionalidad camerunesa
NOTA DE INFORMACIÓN
Mediante la presente nota de información, el partido político Fuerza Demócrata Republicana, FDR, informa para el conocimiento de la opinión pública nacional e internacional que el pasado jueves, día 18 del presente mes de agosto de 2005, los militantes de esta formación política exiliados en la República de Benín, detuvieron a un espía camerunés al servicio de la dictadura de Guinea Ecuatorial, que había sido enviado a dicho país para tentar de nuevo contra la integridad física de los militantes de FDR, como se registró en enero con el secuestro de Juan Ondó Abaga.
El detenido es el camerunés identificado con el nombre de Jean de Dieux Nguema Cristien, que recientemente participó también en el secuestro de tres militantes de FDR en Nigeria el pasado mes de abril: Florencio Elá Bibang, Antimo Edú y Felipe Esono Ntutumu, que actualmente languidecen, en absoluto estado de incomunicación, en las prisiones de Guinea Ecuatorial, sometidos a fuertes torturas y a una restringida dieta de un pan seco al día, por cada uno.
Después de su primera misión, Nguema Cristien fue contratado oficialmente como espía internacional por el régimen de Teodoro Obiang Nguema y en los últimos días fue enviado a Benín con el objetivo de secuestrar o asesinar a los militantes de FDR exiliados en dicho país, según ha manifestado él mismo, primero a quienes iban a ser sus víctimas y después a la policía beninesa.
Hacía alrededor de una semana que el verdugo llegó a Benín y se contactó, por indicación de los funcionarios de la embajada de Guinea en Yaoundé, con los exiliados. Ya les había visitado en dos ocasiones y las sospechas de que podría tratarse de un elemento peligroso se adueñaron de los militantes de FDR. Por eso, en la tercera visita le sondearon y confirmaron su sospecha.
Concretamente, los militantes de FDR, Fabián Ovono Esono, José Ndong, Manuel Ndong Asumu y María Gorriti Ndong Nasales, fueron quienes se dieron con el espía en su domicilio. Como a priori no quiso confesar el real motivo de su viaje a Benín, por eso optaron por atarlo y amenazarlo de muerte si no revelase toda la verdad. Inmediatamente, el espía de Obiang comenzó a narrar toda la verdad sobre su misión y confesó así mismo que es quien hizo organizó el secuestro a los exiliaos de Nigeria. Que, por esta misión, le pagaron 45 millones de francos CFA, la misma cantidad que le han prometido si hace lo mismo con los de Benín. Mientras se encontraba atado, rogó más de una vez que le dejaran telefonear al Director General de la Seguridad Presidencial, Julián Ondó Nkumu, para que le enviara 15 millones de francos CFA, que los entregaría para que el caso no transcienda a las autoridades de Benín.
Su petición no fue aceptada por los militantes de FDR y una vez escuchado sus testimonios, llamaron a la policía, que intervino inmediatamente y se izo cargo del espía. Condujo a todos a la Comisaría para oírles en declaración sobre lo que había pasado. Allí y en presencia de los militantes de FDR, el camerunés no solo mantuvo su primera versión, sino fue más allá y detalló a la policía toda la trama. “Trabajo para el Gobierno de Obiang Nguema y es el que me ha enviado a secuestrar a los políticos de Guinea Ecuatorial que viven en Benín...”.
En vista de la envergadura del caso, el Comisario Jefe de la Policía, informó de inmediato al Ministro del Interior, quien instantes después se presentó personalmente en el lugar y dio instrucciones para que le mantuvieran en un lugar de máxima seguridad, en espera de ser procesado judicialmente. Dirigiéndose a los exiliados guineanos, les aconsejó a no bajar la guardia, mantenerse vigilantes e informar siempre a la policía de cualquier indicio sospechoso de tentar contra su seguridad e integridad física en Benín.
Sorprendente, mientras los militantes de FDR todavía seguían en las dependencias policiales, el Comisario Jefe recibió un telefonazo desde la vecina República Federal de Nigeria. Era el embajador de Guinea Ecuatorial en dicho país, Heriberto Meko Mbengono, quien se interesó sobre la situación del espía detenido y ofrecía un cheque en “blanco” para su inmediata puesta en libertad y facilitar su salida urgente de las tierras beninesas. Como respuesta, el Comisario le dijo que no era tanto por el dinero, sino el asunto ya había adquirido tal envergadura que hasta incluso el ministro del Interior y el presidente de la República ya están al corriente y por tanto, le dijo, no había nada que negociar, sino por vías legales y judiciales.
Según se supo de las propias manifestaciones del detenido, su salida de Camerún fue coordinada por el Cónsul de Guinea Ecuatorial con destino en Yaoundé, Joaquín Obiang Nkumu, hermano del Director General de la Seguridad Presidencial, Julián Ondo Nkumu, quien le dio los nombres y la dirección donde residen los militantes de FDR y otros exiliados. Julián Ondó Nkumu, junto al embajador de Nigeria, son los máximos dirigentes de las operaciones de secuestro que el régimen está llevando a cabo en los últimos meses a los políticos exiliados en los países vecinos, Camerún, Nigeria y Benín.
El régimen de Teodoro Obiang Nguema siempre ha intentado negar que haya ordenado secuestrar o eliminar a políticos de la diáspora, pero este caso de Benín es un hecho suficientemente claro y contundente para determinar su plena participación y consentimiento en los secuestros e intentos de asesinato que están siendo víctimas los políticos del exilio.
Fuerza Demócrata Republicana espera y exige de las autoridades de Benín que esta vez utilicen todos los medios legales que les ofrece el Estado de derecho y las leyes internacionales para llevar ante los tribunales internacionales competentes al Gobierno de Guinea Ecuatorial que, por segunda vez consecutiva, ha violado abiertamente el derecho internacional con el intento de secuestro y de asesinato a exiliados políticos residentes en su país, transgrediendo, de esta forma, los convenios y tratados regionales e internacionales suscritos en materia del derecho internacional.
FDR mantiene su vibrante llamamiento hecho a todas sus células nacionales y en el exterior, así como todos sus militantes, donde quiera que estén, a que se mantengan vigilantes y reaccionen, en todo momento, con los mismos mecanismos y métodos, ante cualquier intento de amenaza de la dictadura susceptible de poner en juego sus vidas. Ya no hay nada que negociar ni esperar de la dictadura para acabar con nuestra persecución y ahora nos compete a todos, emprender todos los medios de contraviolencia a nuestro alcance para poner igualmente en entredicho los intereses de la dictadura fuera y dentro del país.
En el exilio, a 21 de agosto de 2005
La Secretaría General, encargada de Prensa e Imagen.
Fuente: FDR/Secretaría de Prensa e Imagen
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