Malabo:  30°C | Rocío: 26°C
   Madrid:  10°C | Rocío: 07°C
 Malabo     Madrid
Logo de genet
      Buscar: en:   Noticias   Enlaces   Anuncios  

Login

Home
Intro/Ayuda
Noticias
Anuncios
Autores
Lenguas
Foro de Debates
Apuestas
Quiz
Calculador de Francos CFA a Euro
Calculador de Euro a Francos CFA
F CFA <---> Euro
Cambios Recientes
Contacto
Suscribirse
Foro/Chat
Estadística
Enlaces
Documentos
Promoción
Su página de inicio
Recomendar

¡Viva Patricio Nbe!

Visitas desde
06/02/2003 :


Galeria de Ilustres de Guinea Ecuatorial

Formato para impresión Email anterior Noticias posterior Compartir en Twitter

Editorial

PARA DESEAR ALGO, HACE FALTA TENER UN PAR DE HUEVOS PARA CONSEGUIRLO


publicado por: Crispin Mba el 10/02/2011 0:26:07 CET

Dicen que entre el deseo y la obtención de lo deseado irremediablemente está el esfuerzo, el sacrificio, el impulso y la constancia, además de otras cosas más que pueden ayudar a mantener los principios señalados. Desgraciadamente estos principios tan sagrados y tenidos en cuenta por cualquier persona o colectivo humanos que busca conseguir cualquier fin deseado, brillan por su ausencia en los procesos de consecución de fines deseados por los guineanos. Mis paisanos desean conseguir todo o casi todo sin esfuerzo, sin entrega y sin sacrificio, sin constancia y sin radicalidad.

José Bono, Presidente del Congreso de los Diputados de España viaja a Guinea y regresará como lo han hecho otras autoridades españolas, y nada va a pasar. Seguiremos deseando ver a nuestro pueblo en libertad, desearemos una convivencia democrática entre bubis y fang, entre Ndowes y Bujebas, entre Annoboneses y Corisqueños, desearemos que el futuro de nuestros hijos sea mejor que nuestro presente; pero quedamos sólo en eso, sin asumir las prerrogativas del deseo, porque nos antojan demasiados difíciles. Casi es un derecho universal como el de pensamiento, el deseo, pero no nos engañemos, éste derecho de desear, va necesariamente unido con el deber y la obligación de sacrificarse, esforzarse y de mantenerse.

Es cierto que en la historia de la humanidad, y de los pueblos, incluso de la mismísima creación, ha podido, en ocasiones mediar el azar, la batuta mágica, la chiripa, el vudú y otras prácticas espiritistas que gusta a los guineanos, pero son las menos ocaciones; digo y lo repito, son las menos ocasiones, para no decir ninguna. Por mucho que creemos que la situación de Guinea Ecuatorial lo resolverá el azar o un hipotético no se qué... es mentira y falacia naturalista.

Lamento decir que aquellos que trabajan para destruirnos no lo hacen desde el azar ni desde la chiripa, sino a través de métodos bien pensados y bien ejecutados, bien estructurados, con una mayor dosis de esfuerzo e insistencia. Sino es así, que lo pregunten al gobierno español y la dictadura guineana, cuántas veces se han peleado y cuántas veces se han vuelto a reconciliarse. Desgraciadamente estos tienen una fuerza mayor que no depende sólo del deseo sin ningún esfuerzo ni sacrificio, sino que cuentan con algo más que eso.


De nuestras familias aprendimos que desear o soñar era sólo un primer paso, no era tan siquiera el segundo ni el tercero, sólo el primer paso de un larguísimo camino de obstáculos y dificultades, pero los cuales habría que saber sortear y superar, y no sin esfuerzo ni sacrificio. Muchos, ya muertos y otros con poco hálito de vida, sudaron gota gorda y tinta para dejarnos todo lo que Ios Nguema han destruido y están destinados a romper en trizas, el primero y el segundo ya ejecutaron la obra, para que el III Nguema la rematara. Durante este tiempo, ¿Qué hemos hecho los guineanos? Desear, desear y desear, nada más. Sin ninguna capacidad de sacrificio, sin ningún paso al esfuerzo y sin ninguna resistencia a defender lo nuestro.

Una colosal crisis de valores ha llevado a la sociedad guineana a creer que algunos marcadores de la prosperidad, se pueden conseguir mediante un crédito demasiado fácil y barato, excesivamente rápido, sin ningún tipo de sacrificio ni trabajo coordinado ni continuo; o acudiendo cuanto menos a prácticas satánicas de kong, vudú y más melindres. Todos saben de lo que estoy hablando. Todo se toma a la ligera, los estudios, la familia, los hijos, el trabajo, las creencias, son cuanto menos deseos rápidos y simplones. Todos quieren un despacho y aire acondicionado sin despeinarse, un trabajo sin ejercicio, una fe sin prácticas religiosas, una familia sin pareja ni matrimonio. Hemos alcanzado un estadio de placidez en el que nada se puede alcanzar con la sangre. La corrupción y el trapicheo nos ha dejado dinero barato.

Con este modo tan peculiar de vivir, nos parece que el mundo no va tan mal y no merece perder la vida, por tanto hacemos ruido para esperar el azar y que nos cambie lo poco que nos percance la situación. Todo el fuego cruzado que de manera cruel se vive en Guinea Ecuatorial, pasa sólo y únicamente por el cuerpo de los guineanos que no viven de la nostalgia, sino de la cruda realidad de ver cómo sus hijos mueren por un simple proceso gripal, mientras su riqueza natural es saqueada por otros. ¡Esto sí que no tiene perdón de Dios! No hay plomo que no empape de lleno al puedo de Guinea Ecuatorial. Es ese pueblo que sufre heridas tanto del fuego amigo que el fuego enemigos y de esos daños colaterales de una batalla de espurios intereses personales.


Sabemos que por mucho que hablamos y organizamos grupillos, y sacamos panfletos, no está de moda defender y morir por ese pueblo. Los ideales actuales no dan para que alguien muera para el pueblo. Algunos se erigieron de líderes, pero se olvidaron, que un líder, además de desear y soñar, debe tener carisma, debe ser positivo, tener ideas claras y una visión completa de sus sueños y realizaciones, a demás de predicar con el ejemplo; pero me gustaría saber, en qué nos acordaremos de nuestros líderes. Nada. De manifiestos y otras sandeces, sabiendo que el 80% de esta población que “desean” salvar, no tienen Internet, ni saben leer. Y así nos va.


El modo peculiar guineano ha generado unos aprietos que tendrán que pagar nuestros hijos, a los que no les dejaremos NADA. Miramos a España, a Francia, a Estados Unidos, a uno y a otro los culpamos de no esgrimir sugestivamente la conciencia que nosotros mismos nunca hemos tenido. Nadie de nuestros supuestos líderes, de fuera y de dentro han asumido un discurso duro de esfuerzo, de acción y reacción. Siempre la solución lo buscamos en los resultados y no en el planteamiento, siempre en otros y no en nosotros mismos.

Llevamos ya más de 40 años con el mismo odio y la misma lluvia y todavía caminamos mendigando algún líder capaz de trasladar el mensaje de que hemos vivido del espejismo y del cuento, oportunismo y de la mentira y la vida fácil y que con esto no podemos sino llevar nuestras vidas y la de nuestros hijos a la hipoteca social y de aventura callejera. Así un día somos el partido radical y dos días después, nos situamos “en la cocina”. Nadie de nuestro líderes es consciente de que es hora de responsabilidades, del esfuerzo y rendimiento, es hora de iniciativas, en lugar de manifiestos sin ningún valor, ni de multiplicar coaliciones irrelevantes; ni pedir a Bono ni al sufrido pueblo de Guinea Ecuatorial, que hagan lo que los líderes no son capaces de hacer. Es el momento del trabajo, de imaginación, la anticipación y la prudencia. Sobre todo de acabar ya con esto. Todos hemos asistido a la lucha del pueblo de Sahara: manifestaciones, intervenciones en los organismos internacionales, huelgas de hambre… ¡Esto si que son líderes que motivan y dan ejemplo! El líder debe saber que lo es para bien y para mal.

Esperemos que el azar, el vudú y las prácticas brujeriles nos salven de este tormento, que a buen seguro, se pronuncia el advenimiento de Tercer Nguema. Seguiré reflexionando.


Fuente: opinión

¡Nota importante!
El contenido de los artículos publicados no refleja necesariamente la opinión de la redacción de guinea-ecuatorial.net
Véase también la declaración sobre el uso de seudónimos

Usuarios en linea: 579


Noticias
Recientes

Síguenos en:

© Guinea-Ecuatorial.net (Nvo Zang Okenve 2004 - 2014) - Foro Solidario por Guinea. Todos los derechos reservados. email: info@guinea-ecuatorial.net