PACO SE FUE
Por Joaquín Mbomio Bacheng
Francisco Zamora Loboch, es una de las plumas más brillantes del espacio de creación literaria hispanoguineana. Su narrativa se destaca por su peculiar contenido y por el extraordinario manejo de la lengua castellana de este talento poco común. Zamora Loboch nos ha dejado joyas de arte de las que se destaca "Bea" (1973), "Cómo ser negro y no morir en Aravaca" (1994), poemas "Nuestros eróticos y viciosos círculos", "Memoria de laberintos"(1999), "Salvad a Copito", "El prisionero de la Gran Vía". "Conspiración en el Green (el informe Abayak)“Madrid, SIAL, 2008.
Paco Zamora formaba parte de la corriente hispana o castellana de la literatura guineana. La componen personalidades cuyas obras se inspiran y se sitúan en el contexto cultural hispano, valorando su aportación (la lengua y la cultura) poco importa si el tópico tratado es africano.
En el marco formal son literarios que buscan la pureza castellana, se evita al máximo el empleo de modismos y localismos guineanos. Los autores de la corriente castellana lanzan un llamamiento al mundo hispano y más allá porque la dimensión de su mensaje, culto y universal, ya no tiene cabida en la “pequeña España”, las obras de Donato Ndongo-Bidyogo, por ejemplo, se estudian mucho más en las universidades americanas, aunque en el empeño por la modernización de la sociedad africana, los hispanos guineanos consideran a España como fuente natural de la hispanidad. Algunos de sus principales representantes han pasado parte de su vida profesional en la península ibérica, para ellos la literatura es un compromiso social (Paco Zamora), una vocación (Justo Bolekia-Boleká) que puede llegar a ser un apostolado (Donato Ndongo-Bidyogo).