El CPDS asegura que ¨no ha tirado la toalla¨ y que a partir de ahora intentará canalizar el descontento popular detectado en la campaña
MADRID, 19 (EUROPA PRESS)
El principal partido de la oposición ecuatoguineana, Convergencia para la Democracia Social (CPDS), advirtió hoy al presidente Teodoro Obiang Nguema de que los guineanos ¨están hartos¨ de su régimen, tal y como se ha ¨palpado¨ durante la reciente campaña electoral, y de que si continúa cerrando el camino a la democracia el futuro del país, que es ¨incierto¨, podría estar ¨abocado a la violencia¨. Por el momento, el objetivo de la oposición es intentar canalizar el descontento popular detectado en los fraudulentos comicios del pasado domingo.
En rueda de prensa celebrada en Madrid, el presidente del CPDS, Santiago Obama, aseguró que ¨esta vez¨ la oposición no va a quedarse ¨en las oficinas¨ porque durante la campaña electoral la oposición ha podido comprobar ¨que mucha gente puede salir a la calle, que la gente está harta¨ del régimen de Obiang, y no sólo por la falta de democracia. ¨La gente nos pedía comida¨, explicó recordando algunos de los mítines celebrados por la oposición durante la campaña.
Obama advirtió también de que ¨el futuro es incierto, incluso para Obiang¨ si el régimen sigue negándose a dialogar con seriedad, y aconsejó al presidente que se retire a su localidad de origen, Mongomo, con toda su familia y sin que tenga que ´dar cuentas´ por lo robado, pero que ¨deje Guinea en manos de otras personas¨. ¨No queremos que ocurran cosas que nadie desearía¨, apuntó.
¨No vamos a tirar la toalla, vamos a intentar canalizar ese descontento¨, subrayó Obama, quien expresó además su satisfacción por el hecho de que el mensaje de Convergencia haya llegado esta vez a lugares ¨donde la oposición nunca había estado¨, y eso gracias a los 47 millones de francos CFA (70.000 euros) proporcionados por el Gobierno para su campaña (frente a a los 8.000 millones de francos CFA de que supuestamente se habría beneficiado el partido de Obiang). ¨No nos vamos a quedar en casa o callados¨, afirmó.
El problema, según destacó, es que organizar manifestaciones de protesta contra el régimen es imposible porque están prohibidas por ley, y de hecho el CPDS tuvo verdaderas dificultades incluso para celebrar sus mítines electorales autorizados, porque siempre había partidarios del régimen boicoteando sus actos, generalmente ¨mujeres y niños cantando o bailando¨.
No obstante, durante la campaña, Convergencia siempre se las arreglaba para sortear las prohibiciones, por ejemplo colgando todas las semanas en su sede en Malabo carteles a favor de la liberación de su secretario general, Plácido Micó, encarcelado desde el pasado junio, y de todos los presos políticos. La intención es seguir con esta misma política aunque los carteles sean retirados de forma sistemática por la Policía.
UNION INTERNA
El problema añadido es que toda una generación de ecuatoguineanos, los menores de 33 años, ha conocido sólo la dictadura, por lo que se hace indispensable un ¨trabajo interno¨ para que estos sectores de la población tengan un ¨marco de referencia¨ que sea ajeno al que la dictadura les ha impuesto. Para todo ello, añadió Obama, resulta fundamental la unidad de la oposición ya que hasta ahora Obiang ha ¨aprovechado y fomentado¨ las divisiones.
El primer paso de Convergencia, anunciado poco después de la retirada de la candidatura de Celestino Bacale el mismo día de la votación, fue la exigencia de que el régimen convoque elecciones en un plazo de seis meses, y de que los comicios cuenten con la supervisión de observadores independientes. El CPDS no está dispuesto a negociar con el Gobierno de Obiang a menos que se haga sobre la base de un programa democratizador.
Paralelamente, la oposición va a reforzar su estrategia de información en el exterior con el fin de recabar apoyos entre la comunidad internacional, incluyendo un grupo tan esencial como son las petroleras que trabajan en Guinea, ya que ¨ahora se nota cierta receptividad y no vamos a desaprovechar ni una sola iniciativa¨.
En este sentido, el presidente del CPDS acogió con satisfacción las palabras de la ministra de Asuntos Exteriores, Ana Palacio, que afirmó que todo indicaba que los resultados de las elecciones no eran limpios. Según explicó, estos comentarios ¨han sentado muy mal¨ al Gobierno guineano ¨porque no se los esperaban¨.
Fuente: EUROPA PRESS