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La irracional, corrupta y criminal accesión a la propiedad de la tierra otorgada por la ilegitima voluntad de Obiang. publicado por: Carlos Jorge Ruiz el 10/09/2008 12:05:03 CET
La verdad es que uno siente una cierta decepción al leer los comentarios que ha suscitado la Ley kalunga-obiananguera sobre la propiedad o, mejor, sobre la apropiación de la tierra en Kalunga (Guinea Ecuatorial bajo el yugo del criminal asesino Obiang). Lo primero que se observa es el absoluto grado de discrecionalidad y el absoluto poder (total y, como siempre, sin control y sin limitaciones) de disposición de la “Presidencia” al respecto, cosa ya habitual en este régimen de Obiang en el que Obiang lo es todo. La Ley viene a decirnos que Obiang seguirá siendo el todo, el que disponga todo, pese a la farsa electorera del próximo 2009, si es que no se remedia, que la cosa es difícil por no decir imposible. No hace falta mencionar - por lo claro que está - cómo esa discrecionalidad en el poder de disposición de la tierra no sujeta ya a propiedad (y tal vez a la sujeta por propietarios no afectos) se va a utilizar (o legalizar) por el poder (Obiang) y no solo para incrementar la riqueza personal y la de sus allegados familiares, también se utilizará para reforzar los lazos de lealtad y afinidad para con todos aquellos agraciados por el poder en la toma de propiedad anterior a la Ley y posterior a la entrada en vigor de la misma. Las posibilidades de cohesión del núcleo duro de la nomenclatura y su ampliación, por esa vía, son enormes. Y uno observa el esperpento comentario de Humbeto Riochi, un bubi criticando la limitación de medidas discrecionales que en ese sentido desfavorecen a un bubi en concreto (ABC) frente a un fang en concreto (CBA) y a los bubis en general por la dinámica que se espera puede surgir de esa Ley (antes ya sucedía así también y no se criticaba) que personaliza en Obiang todo por el poder de disposición total sobre la propiedad de la tierra. Ignoro si el portavoz del Maib, el tal Humberto Riochí no es capaz de observar por encima de lo étnico, como suele ser habitual en el Maib pero, la “cosa”, la “Ley” y sus actuaciones precursoras, sobrepasan lo étnico claramente y preconfigura unas condiciones de total desastre en la escena territorial (urbana y no urbana), no solo para la isla de Bioko y los originarios de esta isla, los bubis que, participan, en alguna medida de esa dinámica, como el señor ABC, PARA TODOS LOS GUINEANOS. Vamos a centrarnos. ¿Qué es lo que no se critica, seños Humberto? ¿Cuál es el verdadero desastre, además de la irracionalidad que puede derivarse de ese grado total de discrecionalidad de que dispone Obiang para favorecer a “los suyos” (ya sean fangs, bubis, …)? ¿Qué es lo que dice la Ley (y sus actuaciones precedentes que legaliza) del modelo elegido además de ese grado total de discrecionalidad? Pues muy sencillo, EN REALIDAD el modelo elegido o derivado de configuración y ordenación o, mejor, de desordenación territorial. La ley lo pone claro, por si no fuera poco ese poder de disposición absolutista. Vamos a dejar lo no urbano (rústico) y vamos a centrarnos, de momento, en lo urbano, en la configuración de las ciudades, por ejemplo, ahora sometidas a la voluntad discrecional de concesión de suelo público con la condición de … …EDIFICAR (según la Ley o de su propiedad concedida anterior y libre disposición). Y ese es uno de los problemas a tocar, señor Humberto, el de la configuración de la ciudad. No se puede, sin más, ceder la propiedad (pública, para mayor abundamiento) para construir sin más. Ya incluso la propiedad privada tendría que limitarse an algún sentido que veremos. Puntos destacables:
1)La ciudad debe tener una gestión democrática y eso es lo exigible por todos los demócratas. Es decir, deben existir unos planes de urbanismo que definan la ciudad, que recojan la participación popular en el diseño de la misma, con su exposición pública, con sus alegaciones, con su limitación de la propiedad y, por su puesto, con la limitación de la concesión de suelo para edificar en cuanto a superficie y volumen, en cuanto a funcionalidad en zonas: vivienda, suelo industrial, zona verde, …. La ciudad se debe diseñar entre todos, democráticamente, eso es lo exigible, no por la oportunista decisión de un allegado a Obiang de hacer lo que le venga en gana una vez obtenida la propiedad de un terreno urbano por favor expreso de Obiang y su régimen. Se debe, - en una gestión democrática de la ciudad - dar opción a toda la población, a sus estamentos representativos, sindicatos, asociaciones de vecinos, individualmente… que la pueda participar en la configuración de la cuidad, en los espacios destinados para cada una de las funcionalidades urbanas que puede tener el suelo: vivienda, comercio, industria, servicios, espacios verdes, servicios públicos (bibliotecas, escuelas, centros de salud, …), …amen de los requerimientos mínimos de conexión a una urbanización mínima general exigible: alcantarillado, conexiones de agua, luz, …gestión de residuos. Nada de eso, total discrecionalidad de Obiang y total y lógico seguidismo de los esbirros de Obiang en lo municipal. Lo que impone el modelo kalunga-obiananguero de la propiedad de la tierra, es algo tan irracional o susceptible de irracionalidad - basada en el amiguismo y en la lealtad al crimen - que resulta evidente que en no mucho tiempo, las ciudades perderán mucho en cuanto a funcionalidad, futuro, marketing urbano, diseño urbano, …calidad de vida, en pos de ese amiguismo y sistema de lealtades enriquecedor a muy corto plazo, para unos pocos desaprensivos seguidores de Obiang, sean bubis o fangs, o… lo que sean.
2) La concesión de propiedad o la reclasificación de terrenos o el simple hecho de permitir o de promover la edificabilidad, produce unas PLUSVALIAS evidentes (diferencia de valor entre lo pagado a título oneroso y el valor a precios de mercado del volumen edificable en dicho suelo) QUE, EN ESTE CASO, se apropia exclusivamente y únicamente, el que accede a la propiedad o a la edificabilidad por el favor de presidencia. Y eso es del todo injusto ya que la ciudad, la hacen todos sus habitantes y todos sus habitantes son los que producen y “ceden” el valor que se apropia injustamente en exclusiva el nuevo propietario o constructor de forma individual. No existe, para empezar, ningún impuesto sobre la plusvalía generada por todos y apropiada particularmente por el favor de Obiang. Y eso, es pernicioso porque impone un modelo de enriquecimiento sin esfuerzo, sin reconocimiento del esfuerzo de los otros, de la sociedad den la que se crea esa plusvalía. Obiang no solo concede la propiedad de terrenos urbanos (antes o después de la Ley), concede tambiénm la apropiación de unas plusvalías inmensas que son de todos pero que se apropian de forma individual por su ley, en realidad, por su voluntad. Y eso, independientemente de que la construcción en si, debiera estar supeditada a u Plan general en cuanto a volumen edificable, superficie, superficie destinada a zonas verdes, y una servidumbre de pública utilización (para servicios públicos mencionados) que, en el caso normal es de no menor el 10%. Nada de eso. Por otra parte, es el volumen construido, la superficie construida, la que podría dar logar a una imposición directa sobre bienes inmuebles, una especie de IBI, que pudiera nutrir las arcas municipales con un sistema de ingresos adicionales objetivos adicionales a los que discrecionalmente pueda conceder la administración central o, en este caso, “presidencia”, es decir, Obiang. Eso, tampoco interesa al régimen, interesa la discrecionalidad total de Obiang, su poder de disposición total. ¿Cómo, por ejemplo, va a pagar el IBI el Armengol o cualesquiera de los latifundistas urbanos kalungas? Un régimen criminal lo es pero no se hace tributar por eso. Y eso es lo criticable, señor Humberto, no que a los bubis se les deje participar menos en ese criminal y corrupto merder. Consecuencias: no hay catastro oficial de valoraciones inmobiliarias, no hay imposición directa fiable sobre los bienes inmuebles urbanos, no hay ingresos suficientes para acometer funciones básicas de los municipios (recogida de residuos urbanos, suministro de aguas, … ya sea en gestión pública o privada), no hay dotaciones sociales de suelo para servicios públicos, ya sean escuelas, centros de salud, bibliotecas, …y todo es beneficio privado apropiable individualmente por obra y gracia del todo-poderoso Obiang. NO hay plan ni concierto, ni gestión democrática de la ciudad ni diseño de la ciudad entre todos, ni nada de nada que no sea el poder de decisión de Obiang. Aunque se reconozca la propiedad privada, no hay que se tan brutos: hay algo que se llama el sentido social de la propiedad a lo que debe supeditarse todo, incluso la voluntad de Obiang en hacer propietarios y amigos del régimen. ¿Pero esto, no lo sabíamos ya? ¿No vemos las basuras acumuladas, la falta de servicios mínimos de alcantarillado, de gestión de agua, de falta de servicios sociales mínimos en educación, en salud, en cultura (tienen que venir los competidores españoles y franceses a poner algo en ese sentido, y por la propia competencia), la falta de diseño urbano, los barrios sin servicios mínimos y en una precariedad total,…? El régimen de Obiang es lo peor que nos puede pasar desde el punto de vista urbano y desde el punto de vista no urbano, que es como la Ley kalunga define los bienes terrenos. Es la irracionalidad, la impone, impone la discrecionalidad, la falta de planificación y control, el desorden total, el enriquecimiento - a corto plazo – de unos pocos leales en contra del empobrecimiento de unos muchos, todos los pueblos de Guinea Ecuatorial, y no solo los bubis. Son solo dos puntos los tocados, de entre una multitud a tratar en el tema del suelo, ya urbano ya rústico.
Carlos Jorge de Moganda Vecino del poblado de Moganda, en el exterior contra su voluntad.
Fuente: Foro Democrático de Guinea Ecuatorial y GE.NET
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