Usted, Señor Ministro, Salomón Nguema Owono, estudió en la dictatorial Unión Soviética, dicen que para ser médico (ginecólogo), un profesional a dedicarse a salvar vidas humanas, pero le llaman por las calles de Malabo Dr. Muerte, y no es usted capaz de pensar, ya no digamos reflexionar (cosa imposible para su cabeza), del por qué alguien ejerciendo tan loable y humanitaria labor, termina – y es lo que quedará de su historia-siendo llamado Muerte. Es porque la vox populi, esos guineanos que tienen ustedes atormentados día y noche en nuestro suelo patrio, le atribuyen crímenes, múltiples, algunos de los cuales saldrán a la luz, en una futura Guinea libre y democrática.

Usted y sus colegas del crimen organizado, que es el PDGE y sus gobiernos, encabezado por su presidente fundador, un día sí y otro también, siguen atropellando, mediante detenciones arbitrarias, torturas, expulsiones de trabajo, intimidaciones, amenazas, a guineanos que han expresado alguna opinión sobre la mala gestión, que les es propia a ustedes, en los asuntos públicos de nuestro país, que consideran paranoicamente que les pertenece en propiedad. Ustedes destilan estupidez, incompetencia, malicia y complejos de inferioridad a raudales. De hecho, por ejemplo, usted, Nguema Owono, que ha estudiado gratuitamente desde la primaria hasta la universidad gracias a Guinea Ecuatorial, se fue a la Unión Soviética sin haber acabado los estudios secundarios; se fue sólo con el Bachiller Elemental superado y esto se nota.  El camarada Nguema Owono fue seleccionado personalmente por el tirano Mesie m´Nguema Biyogo por ser un buen joven revolucionario, por su ferviente entrega y apoyo al régimen que, como su amo Obiang Nguema, ya llaman ahora de Triste Memoria; y esto, se nota. En la falta de formación de base, hablando de su amo, por ejemplo, los guineanos queremos saber quien fue su compañero de aula o asiento (por ejemplo, en el 4º o 5º curso) en el centro de bachillerato laboral La Salle de Bata, o de los mismos cursos en Rey Malabo o Carlos Lwanga (los dos únicos institutos secundarios que existían en los años 80) del flamante Ministro de Inseguridad Nacional, Nicolás Ongom Abum Nchama; o que nos diga el PF cómo es que, mientras sus compañeros de armas eran todavía en agosto de 1979 tenientes del ejercito, como hacía diez años atrás (1969) cuando Macias Nguema asumió el poder absoluto instaurando el que llama Régimen de Triste Memoria, en este periodo él fue escalando de teniente a capitán, de capitán a comandante y de comandante a teniente coronel, sin haber pasado por ninguna otra formación militar complementaria. Significa que Obiang Nguema fue probablemente el guineano que más meritos hizo por que la primera dictadura fuera más cruel, al menos en la actual isla de Bioko. O sea, que el crimen, la malicia y los complejos forman parte de su ADN público. Y esto se nota. Ustedes son filo y afrofascistas, y se han perjurado en seguir así hasta el fin de sus vidas, llevándose por delante a Guinea Ecuatorial y sus gentes, esta Guinea a quienes debéis todo lo que son ahora.

Señor Nguema Owono, señores Miembros del Crimen Organizado de Guinea:

Una de las prácticas que reflejan esta actuación recurrente suya lo podemos ver, por ejemplo, cómo han actuado (practicando la detención y/o expulsando del trabajo ) contra el maestro Julián Abaga Nkogo de Bata, Antonio Ondo Obiang Micue empleado de Arab Contractor, los activistas Paysa Eló y Luis Nzo, el sanitario del Hospital INSESO de Bata, Feliciano el patriota empleado del Sistema de la ONU en Malabo, y otros tantos, o ayer mismo, contra Nuria Obono Ndong, por haber expresado una opinión sobre la gestión pública. Todas estas personas han sufrido o sufren al día de hoy cárcel por una  opinión, por tanto, son presos políticos; han renovado ustedes las instrucciones  para vigilar, perseguir y represaliar, con espías o muertos de hambre, en las calles, redes sociales y comunicaciones por internet.

Cojamos el actual caso de Obono Ndong y les hacemos unas cuantas puntualizaciones, que denotan lo que son, “monas vestidas de seda”: