El movimiento contra la segunda esclavitud (MCSE) celebra la decisión del presidente Obiang de retomar el dialogo y el consenso, y la actitud de la clase política que asiste a dicha “sentada” por seguir confiando en una solución pacífica y elaborada por los propios guineanos al malestar que impregna a la sociedad. Malestar que por un lado no ha de entenderse como precariedad económica sino más bien como producto de toda una serie de demandas insatisfechas de la sociedad civil ecuatoguineana. Nosotros creemos que la transformación política que necesita Guinea ecuatorial no puede dejar de lado la idea de una transformación cultural. En los tímidos inicios del ensayo democrático en Guinea, el presidente Obiang dijo “ Ojo con las ideas importadas…”. Nosotros creemos que efectivamente hay que ir con cuidado con las ideas importadas en tanto que todo el discurso filosófico de la modernidad europea, al que muchos políticos africanos se abrazan, ha tenido y tiene como victimas a los pueblos colonizados. Tenemos que ser capaces de cotejar la teoría y la praxis del discurso de la modernidad occidental, o sea, “Ojo con las ideas importadas”.

En el discurso citado el presidente Obiang decía también “Guinea ecuatorial no está a la altura de…”. Allí discrepamos totalmente con el trasfondo de la proposición, no sólo “Guinea no está a la altura de…” sino que en modo alguno nuestra meta debe ser estar “…a la altura de…”, pues en el juego geoestratégico de nuestros tiempos el conocimiento es poder pero no es conocimiento hallado a través del phyllos a la sabiduría sino producto de la consecución de un causa instrumental cuyo fin es la dominación. Con ello conocer no es ilustrarse sino ser capaz de dominar. No debemos ni podemos permitirnos fijar como meta imitar los parámetros de las sociedades occidentales pues ellas hacen las reglas y saben cómo sacarles el máximo beneficio. Ahora bien, la posición del MCSE no debe ser tachada de anti-occidental o anclada en el pasado pues asumimos que a la vez que rechazamos el cinismo del discurso filosófico occidental hemos de ser capaces de valorar sus logros en lo que concierne a la capacidad de generar autocrítica y generar nuevas metanarraciones, nosotros debemos ser capaces de encontrar mecanismos que aseguren que el camino que querremos iniciar hoy no nos lleve a un callejón sin salida.

La autocrítica es importante, cuando Placido Mico cuestiona la gestión del partido Gubernamental ambas partes deben tener claro que la dinámica no es de enemigo-amigo sin de adversarios ideológicos, ambas partes deben tener claro que al criticar al otro se están también criticando a sí mismos. Hay que generar una nueva identidad, debemos de ser capaces de detectar los peligros que nos acechan en el futuro a corto y largo plazo. La “sentada de Mbini” es un paso pero hay que dar más. Hay que promover un debate a nivel nacional que, no político, sino cultural. A la clase política que puede tomar decisiones, al partido gubernamental y a los opositores, a todos los guineanos y guineanas, el MCSE os sugiere que se inicie una ronda de conversaciones en torno a la transformación cultural que necesita nuestro país (con la participación de partidos políticos, grupos de interés económico, grupos de presión social, militares, organizaciones no gubernamentales locales, consejos de ancianos).

Tenemos un problema político pero este se agrava por nuestra desubicación cultural. ¿Qué es Guinea Ecuatorial? ¿De dónde viene Guinea ecuatorial? ¿Hacia dónde se dirige Guinea ecuatorial?



Fuente: Oráculo

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