La creación y desarrollo de este
Movimiento recogen el espíritu patriótico
y democrático que han sido decisivos para
el nacimiento de un Movimiento Social
Demócrata que, al mismo tiempo, reclama
el derecho de libertades políticas y un
nuevo y más apropiado desarrollo
económico en la República de Guinea
Ecuatorial. Como resultado de la
complicada actual situación que azota a
nuestro país, se ha experimentado un
verdadero despojo de sus recursos y
consiguiente empobrecimiento.

La democracia parte del pueblo, así que el
gobierno debe estar con el pueblo. Sin
embargo, al modelo democrático de
Obiang Nguema Mbasogo no se ve
implicado en esta filosofía. Sus funciones
deberían ser las de llevar la voz del pueblo
a las instituciones políticas, facilitando la
participación ciudadana mediante cauces
directos y procurando el mayor beneficio
para el grueso de la sociedad, no la de
enriquecerse y medrar a costa del país,
aferrándose al poder a través de una
dictadura consolidada a base de sobornos
y compra de voluntades, rodeado de
grupos de mercenarios extranjeros
encargados de su seguridad personal;
mientras el pueblo se debate entre la
pobreza, el hambre y la miseria.

El ansia de poder de Obiang Nguema
Mbasogo es bien conocida por su tiranía,
odio y traición. Una característica siempre
presente en su régimen y últimamente con
más relieve, si cabe, es el nepotismo:
hermanos, hijos, primos, tíos, sobrinos y
cuñados, amén de otros parientes más
lejanos del nutrido clan familiar maneja
las diversas palancas del poder.

Obiang se resiste en numerosas
ocasiones a mostrarse de acuerdo sobre la
democratización del país y el respeto a los
Derechos Humanos que le exige la
oposición; sin embargo, todos estamos
siendo testigos de cómo la represión
injusta contra los derechos democráticos
de los ciudadanos, marcada por las
intimidaciones, secuestros y asesinatos se
apodera del país.

El extraordinario boom del petróleo,
ha agudizado los desequilibrios y las
contradicciones de la Guinea Ecuatorial de
Obiang Nguema Mbasogo. Por un lado,
asombra a todos cómo el PIB por habitante
pasó de los 360 dólares de la década de
los 90 a los 8.510 desde 2006, lo que
equivale a ascender de la posición 127ª a
la posición 28ª en el ranking mundial de
los países con mayor renta per cápita y
que en 2010, año en que el PIB creció
otros 144%, hasta alcanzar los 20.009
dólares, el valor de las exportaciones
triplicó el de las importaciones.

Y por otro lado, el valor de estas
variedades del crecimiento no se ve
traducido en mejoras en las condiciones
de vida de los ciudadanos, el IDH es de
0,537, fruto del aumento a ojos vista de la
corrupción y la perpetuación del
autoritarismo. Un frenesí del desarrollo de
las exportaciones minerales con dudosa
rentabilidad social: la carencia laboral; la
falta de inversión en las necesidades
básicas como la sanidad, la educación
etc., el abandono de las exportaciones
agrícolas tradicionales y la codicia de los
escogidos usufructuarios de la renta
petrolera. Son la otra cara de la moneda de
una bonanza que ya ha convertido a
nuestro país en el tercer productor de
petróleo de África subsahariana después
de Nigeria y Angola y que, en 2012 prevén
igualar a Kuwait en el record de
producción relativa: cuando se alcance la
cota de los 500.000 barriles de petróleo
diarios.

Ante esta perspectiva, el Movimiento
Social Demócrata constituye una
plataforma para tratar de promover una
mejora de las condiciones de vida de los
ciudadanos y establecer un modelo de
estado “basado en los principios sociales
del derecho, la pluralidad, los valores de la
justicia y de la democracia”. Además de
garantizar el derecho de libertad e
igualdad de todos los guineanos ante la
ley:

* Defender la racionalidad del Estado
para acabar con el derroche y abuso de
poder mediante políticas orientadas a una
total transparencia y cohesión social.

* Instaurar el principio constitucional
y democrático de la separación e
independencia de los poderes del Estado.

* Reordenar las administraciones
públicas para su mayor eficacia y mejora
de la calidad en la prestación de servicios
a los ciudadanos.

* Poner fin a la exclusión social y dar
urgente solución al dramático problema de
los refugiados y a todos los que, de una
forma directa o indirecta, han sido
víctimas de este régimen por defender los
valores democráticos.

* Permitir ejercer con plenitud las
libertades de expresión y de opinión y los
derechos de reunión y asociación,
eliminándose las medidas que los
restringe.

* Señalar los elementos de reforma
que resulten precisos para fortalecer a los
partidos políticos, para el más adecuado
funcionamiento de las instituciones
democráticas y, la adopción de un sistema
electoral que garantice la libre información
y auténtica expresión de la voluntad
ciudadana.

* Afrontar con optimismo los
problemas económicos y sociales con un
programa de emergencia, que cuente con
amplio consenso entre los actores
sociales y poner en marcha la capacidad
productiva mediante industria agrícola,
construcción, petrominería y demás
actividades, a fin de dar solución a los
problemas sociales más urgentes como la
sanidad, la educación etc. y mejorar la
infraestructura.

* Velar por una equitativa distribución de
la riqueza, impulsando las actividades
económicas sin salirse de la órbita que le
es propia, especialmente, en esta crítica
coyuntural en que la política económica
implementada ha reducido gravemente el
poder adquisitivo de los sectores de
menores ingresos.

La participación ciudadana, sin la cual no
podría realizarse una recuperación
económica, ni establecerse un régimen
democrático sólido, dignifica su esfuerzo
e imprime un sentido social a la
producción, que a su vez, se desvincula
del propósito de concentración de la
economía y la sujeta a normas de bien
colectivo, estimula su capacidad creativa y
de reactivación.

El Movimiento Social Demócrata no
propondrá un consenso estático, que
endurezca las injusticias, sino un proceso
de acuerdos dinámicos que en libertad y
con responsabilidad ponga en marcha al
país, corrija sus desequilibrios e impulse
un crecimiento económico sostenido y
una democracia realmente participativa.

El afianzamiento de la democracia se
consigue desde la unidad de los
demócratas, mediante la formación de un
nuevo espíritu de solidaridad nacional y de
respeto recíproco. La eliminación de todos
los sectarismos y el claro rechazo a la
violencia, son capaces de asegurar la
primacía de los valores morales, el orden
interno y la seguridad exterior y de
impulsar un desarrollo que satisfaga las
necesidades básicas de los ciudadanos.

Sólo la democracia es capaz de garantizar
el marco que permite a las fuerzas y
cuerpos de seguridad del Estado, asumir
plenamente las responsabilidades que les
corresponden, cumpliendo con sus
labores profesionales y de contribución al
desarrollo como instituciones nacionales.

Las corrientes de opinión que
interpretamos, ratifican la voluntad de
trabajar en la profundización de los
contenidos y propósitos para acrecentar el
consenso, recuperar las libertades, superar
las inestabilidades y las crispaciones
institucionales de otras épocas, para con
todo ello alcanzar una democracia estable.

“El problema que afecta a todos, necesita
solución de todos”, la apatía que generan,
la parálisis que provoca en los
ciudadanos; la inseguridad. Así que la
única posibilidad de repuesta, es una
mayor reflexión. El Movimiento Social
Demócrata no debe quedarse en una
simple declaración de intenciones, ha de
actuar con valentía haciendo lo que es
necesario hacer, ha de avanzar con
espíritu constructivo y voluntad de hacer
justicia, ha de profundizar en defensa de
los problemas de los ciudadanos, ha de
ser efectivo y vinculante a todos los
niveles. En consecuencia, hace un
llamamiento a la unidad de todos los
demócratas y la firmeza frente a la
autocracia, en defensa de los valores
fundamentales y el estado social de
derecho. Hacernos más conscientes de la
cruda realidad que pesa sobre nosotros,
prestar oído a nuestro corazón
anestesiado por el miedo y ser más
solidarios y participativos por una gran
causa, deben ser nuestras prioridades.

Como guineano, súmate al cambio.
contacto: msdem11@gmail.com

Fuente: Manifiesto político de MSD de Guinea Ecuatorial

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